La hija de Luis Miguel, Michelle Salas, sufrió un grave accidente mientras esquiaba durante sus vacaciones, en las montañas de Vail, Colorado, Estados Unidos.
La hija de Luis Miguel, Michelle Salas, sufrió un grave accidente mientras esquiaba durante sus vacaciones, en las montañas de Vail, Colorado, Estados Unidos.
La modelo dio a conocer las noticias a través de las historias de Instagram y detalló que deberá someterse a una operación y que tendrá varios meses de terapia por delante.
Con gran cantidad de seguidores en esa red social, donde promociona a importantes marcas, la modelo de 31 años le confió a su audiencia: “No soy de compartir este tipo de noticias, pero sentí la necesidad de contárselos ya que será una recuperación muy larga y un poco tediosa. Hace unos días tuve un accidente esquiando y me rompí el ligamento cruzado de la rodilla derecha”.
“Tendré una operación y varios meses de terapia por delante, que para alguien que ama hacer ejercicio y estar activo todo el tiempo no es tarea fácil”, lamentó Michelle, al tiempo que se mostró agradecida por el hecho de que la lesión “no pasó a mayores”.
En otro posteo, la joven les comentó a sus seguidores acerca del esfuerzo que está haciendo para no ver todo negro: “Con el tema del accidente, he estado mentalizándome, tratando de ver el lado positivo"
"He avanzado bastante bien. He estado un poco más deshinchada, pero eso no quita que me tenga que operar, por lo que he empezado con los ejercicios que tengo que hacer para prepararme” señaló.
Decidida a poner su mejor voluntad para salir adelante, la influencer comentó: “Para mí, que soy una persona súper hiperactiva, esto es muy difícil: estar sentada, sin poder caminar bien.... Pero no me voy a echar para abajo y no voy a verlo como algo malo. No agarrar lo negativo sino lo positivo de lo que este capítulo de mi vida me tiene que enseñar”.
En una story donde se la vio con una bota ortopédica, la hija de Luis Miguel compartió una profunda reflexión: “Hoy me queda más claro que nunca, que la vida cambia en cuestión de segundos y que hay que vivir todos los días como si fuera el último”.
“Con esto dicho, aquí estoy de vuelta en casa, aunque cojeando, pero con todas las ganas de que pase esto pronto para volver más fuerte que nunca”, añadió la modelo.
A pesar del dolor que tiene en la rodilla, de la operación que deberá atravesar y de la rehabilitación que, ya sabe, no será corta ni sencilla, la hija de Luis Miguel se mostró empeñada en no bajar los brazos. “No tengas miedo de la vida, ten miedo de no vivirla intensamente", concluyó.