Jueves 29.2.2024
/Última actualización 15:14
Miranda!, el dúo conformado por Ale Sergi y Juliana Gattas, viene de presentarse el lunes en el Festival de Viña del Mar (Chile), donde conquistaron al “Monstruo” (el público que colma la Quinta Vergara), se llevaron las Gaviotas de Oro y Plata, y Ale presidió el jurado. Fue su tercera vez allí, luego de las presentaciones realizadas en 2006 y 2010, y la primera de la mano de “Hotel Miranda!”.
Su último álbum devino en una mega producción musical con elementos teatrales, que narra una historia desarrollada dentro de un increíble hotel en el que Ale y Juli, encarnando a los particulares dueños del lugar, controlan todos los movimientos. Como las distintas partes del hotel, cada canción cuenta con un artista invitado, un huésped con el que interactúan a través de proyecciones, en este show que revisita los clásicos de la formación.
Con esta propuesta también estuvieron días antes en Cosquín Rock, y llegarán a Santa Fe el próximo 4 de abril, en la Estación Belgrano; las entradas pueden adquirirse con descuento en diferentes tandas de preventas a través de www.plateavip.com.ar.
De este momento de cosechar éxito (para un proyecto artístico que en 20 años no paró de generar hits), de su identidad y su conexión con el público conversaron Ale y Juliana con El Litoral, como así también de lo que viene para este año.
Escena total
-Estuvieron en el Cosquín Rock, en el Escenario Montaña, uno de los espacios más nuevos. ¿Cómo vivieron ese show? Que fue una fiesta, lo pudimos constatar.
Ale: -Estuvo lindo el show, la pasamos bárbaro. Es nuestra cuarta vez en Cosquín Rock; nos gusta tocar en festivales, por varios motivos. En lo personal me gusta porque espío un poco los setups de los otros grupos: veo un poco cómo están armados, cómo suenan, puedo verlos desde atrás de escena. Por otro lado, es divertido, porque siempre hay espacios comunes donde te cruzás con toda la cantidad de artistas que hay en el espacio de prensa, te dan ganas de charlar con alguno. Podés ver más shows: y también en lo práctico y marketinero es bueno también, porque te ve mucha gente que tal vez no te vería de otra manera, y podés aprovechar para conquistar nuevos oídos.
Nos fue súper bien en el show, la gente respondió bárbaro; el festival estuvo muy lindo en general, nos quedamos después un ratito, pero disfrutamos muchísimo del concierto.
-Este “Hotel Miranda!” es una puesta muy integral (los percheros, las bailarinas, las pantallas, que además incluyen a los invitados de cada reversión) que les ha traído muchas satisfacciones en el último tiempo. ¿Cómo preparar el show en vivo, cómo se adapta a cada lugar, y cómo ha ido mutando? Cuando lo vas haciendo mucho tiempo, más allá de que sea algo muy seteado, también debe ir cambiando.
Juliana: -Como lo articulamos tiene que ver con lo esencial y lo primero que surge: la idea musical. A partir de los discos pensamos videos que, para este disco en particular, se extendió: fuimos un poquito más allá y quisimos hacer una minipelícula, en la cual todos los vídeos tienen un hilo conductor, se repiten escenografías, personajes que entran y salen. Eso fue en gran parte por colaborar con Melanie (Anton Def), que ha sido la directora de todos nuestros videos de “Hotel Miranda!”; y también ha proyectado ese mismo imaginario para los shows en vivo.
Siempre fue un deseo de la banda y del proyecto poder unir lo visual con lo musical, con el baile, y con un montón de cosas que a nosotros nos divertían de manera un poco más espontánea y accidentalmente, y después las fijamos. A partir de cierto momento en el que tuvimos un poco más de presupuesto y organización, lo planteamos de entrada: “Tenemos este disco, con estas canciones; queremos salir a tocarlo de esta manera, y que continúe. y después ir sumando”.
Y es una gran fantasía: trabajamos un montón, pero también disfrutamos como en Disneylandia en nuestro show propio: nos divertimos. aparecen las cosas, los bailarines, y es genuino el disfrute que se ve.
Con respecto a adaptarnos a los escenarios, a los formatos, también tiene su cosa entretenida; porque si siempre tuviésemos un requerimiento de tal tamaño del escenario, por ahí sería más aburrido. En cambio, vamos viendo cómo nos podemos adaptar, qué cosas entran: los percheros entran, dónde nos cambiamos, las bailarinas por ahí nos pueden ayudar. Se hace más entretenido ubicar los recursos que tenemos según el escenario.
Y también está el tema de que vamos sumando: porque hemos sacado más canciones y seguimos con el concepto del hotel; pero también queremos sumar e ir transformando el show. Entonces tiene una dinámica en constante movimiento, y eso es entretenido para nosotros; y suponemos que también para el público, que puede ver el show más de una vez, porque se van sumando atracciones.
-Sabemos que Ale disfruta; no nos queda duda que vos disfrutás, Juliana: sos “la alegría en movimiento” arriba del escenario.
Juliana: -Yo estoy en Narnia (risas).
Gattas y Sergi durante su show en el Escenario Montaña de Cosquín Rock. Foto: Gentileza Cosquín RockTodo público
-Hay un fenómeno muy especial que generaron ustedes, que no sé si tantos artistas lo han podido hacer: ser una propuesta multigeneracional. Por un lado, se expandieron a que los conozca gente más grande, que por tal o cual canción le fueron empezando a llegar. Y al mismo tiempo hoy conquistan a chicos que a lo mejor tienen la misma edad que alguna de las canciones que están haciendo. ¿Cómo se hace? Una pregunta de la que no hay una respuesta. ¿Cómo lo viven?
Ale: -Lo vivimos más como un fenómeno que como un resultado de algo, porque no sabemos cómo se hace: siempre llevamos nuestra carrera muy a nuestro gusto. Creo que un poco tiene que ver también con que desde el principio nos mostramos muy abiertos y desprejuiciados hacia el público que pueda llegar a sus venirnos a ver. Ahora ya no se usa mucho que te pregunten, pero antes había como una idea de “bueno, ¿a qué target específico estaríamos dirigiéndonos? ¿A quién le estamos hablando?”.
Siempre sentimos que la música pop es justamente música popular, para todo el mundo, y no hay distinción ni de género, ni de raza, ni de edad, ni de religión, ni de nada. Es para es para quien quiera sumarse a la fiesta y pasárselo bien. Entonces siempre tomamos naturalmente la presencia de público de diferentes edades. De hecho, ahora vienen muchos padres con sus hijos; pero tuvimos también un momento en que venían nenes solos, cuando empezamos a tocar, en “Sin restricciones” (solos no venían, los traería alguien). Ahora sí es la familia completa, pero en una época tocábamos en lugares más under o de culto, que nos venía a ver gente más del palo de la discoteca y de los festivales rockeros; y empezaron a venir un montón de niños a partir de “Sin restricciones”.
Entonces siempre el público nuestro fue mutando. Cuando estuvimos de jurados en “La voz Argentina” se sumó todo otro público distinto, empezamos a tocar en otro tipo de fiestas populares y venía gente diferente a vernos; que capaz que no eran habitués ni de discotecas ni de conciertos de rock o pop. Pero como nosotros nunca estuvimos muy “ay, no: quiero tocar para este, quiero tocar para aquel”, pienso que también acompañamos desde ese... no discurso, porque no lo decíamos; pero lo dábamos a entender.
Creo que acompañamos un poco eso, y por eso se toma tan naturalmente que todo el mundo pueda venir; y a nosotros nos da mucha alegría y mucho orgullo que cualquier persona diga: “Voy a ir a ver a Miranda! y me da lo mismo si voy con mi familia, si voy solo si voy con tal o con cual”. Porque se arma una onda linda en los shows: la gente siempre viene con ganas de divertirse, de pasársela bien, y todo el mundo se va contento. Y si vas solo seguro conocés un amigo, y si vas con tu familia la pasás bárbaro también y nadie te va a decir nada.
-Al mismo tiempo pueden hacer una cosa con una estética totalmente propia, sin resignar eso, pero que es abierta para todo el mundo.
Juliana: -Sí, jamás estuvo el planteo de resignar ninguna cosa por el público que venía, o por si venían más niños, o por si los niños venían acompañados; y tener en cuenta tal y tal cosa. Lo que sí nos fijamos siempre es de hacer un show que esté buenísimo: que nunca caiga. Alguna que otra vez experimentamos cambiar el show para ver qué pasaba, y no nos divertimos Nos funciona ir sumando y potenciando un mismo show, que venimos haciendo hace un montón, y nos divierte más a nosotros, nos entretiene más a nosotros eso.
Entonces sí, no resignamos nada, pero sí somos muy complacientes con lo que sabemos que es agradable de ver y de escuchar, y que a nosotros mismos nos gustaría ver de un show como público.
Tras la presentación en el el Festival de Viña del Mar, distinguidos con las Gaviotas de Plata y Oro. Foto: Gentileza Festival de Viña del MarGanar espacios
-La última vez que estuvieron en Santa Fe fue en el Harlem Festival, el año pasado; ahora vuelven a la Estación Belgrano. Están creciendo en algunos venues o recuperando algunos a donde habían estado, pero que después habían cambiado lugares más chicos,
Ale: -Sí: el disco fue muy bien recibido, y estamos haciendo venues más grandes, pero en todos lados: la Estación solos no la hicimos nunca; habíamos estado dos veces en el Harlem, y en Santa Fe veníamos haciendo Tribus. Como toda carrera: habíamos tenido varios momentos, algunos más altos, otros no tanto; pero siempre mantuvimos y siempre teníamos gente que nos venía a ver.
Pero con este último disco estamos haciendo los venues más grandes, que no hicimos nunca. En todos los lugares estamos convocando más gente. Un poco también pensamos que se va acumulando toda la trayectoria, y este disco de alguna manera engloba todo eso, porque son las canciones más clásicas. Entonces capaz que, a algún fanático de hace mucho que había abandonado los conciertos, le pica de venir de vuelta ahora; y viene.
Y bueno, no se pueden negar que la cantidad de colaboraciones que trae el disco también nos muestra a otro nuevo público. Y no me refiero solamente a las de los artistas más nuevos, o más noveles, sino a todos en general. Obvio: cantamos con Emilia, con María Becerra, con FMK, eso nos acerca un montón de chicos que tienen la edad de las canciones o menos; pero también cantar con Cristian Castro, con Andrés Calamaro, creo que por ahí a alguna persona un poco más grande es como que le termina de derribar los últimos prejuicios que van quedando con nosotros, que fueron unos cuantos y con el tiempo han ido cayendo de a uno. Y dicen: “Está bueno Miranda!, vamos a darle una chance”.
Sentimos que tuvimos la fortuna de más colaborar con un montón de artistas distintos que, aparte de lo musical es como que ellos también te dan su venia, de alguna manera; y eso sirve para mucha gente sirve, para que nos presten más atención.
Movimiento continuo
-¿Cómo sigue la actividad para este 2024?
Ale: -Tenemos Rosario, Santa Fe, Lollapalooza; después tenemos gira por México y otra por España. Seguimos planificando el año, pero por el momento eso es lo que podemos contar. Pero sí: ya casi todo el año bastante seteadito y programadito; porque el año pasado fue muy bueno para nosotros, y ese tipo de cosas te dan el margen como para para ir organizando con más tiempo lo que vas a ir haciendo porque ya tenemos la confianza de que hay un público que nos va a estar esperando; entonces podemos ir a los lugares.
-“Souvenir” fue el último álbum de canciones nuevas, en 2021, plena era pandémica. ¿Hay ideas para nuevo material?
Ale: -Sí, ya estamos preparando, estamos grabando: los días siguientes de Lollapalooza vamos a hacer dos videoclips para de a poco ir empezando y delineando el nuevo lanzamiento. Y en abril tenemos varias sesiones programadas para seguir componiendo y preparando: la idea es este año mostrar un disco nuevo, en el que ya estamos trabajando. Ya tenemos algunas cosas grabadas y otras...
Ale: -O por empezar (risas).
-Hay canciones en distintas etapas.
Ale: -Muy distintas: unas ya tienen video y otras no tienen nada.