El trío integrado por Lula Bertoldi, Brenda Martin y Gabriel Pedernera realizará dos shows por streaming como últimos conciertos del año, mientras celebran las nominaciones a los Grammy Latinos por “Seremos primavera”. De todo esto y más contaron los artistas a El Litoral.
Gentileza Nora Lezano Como crisálidas: Brenda, Gabriel y Lula encontraron en este álbum un punto de inflexión en su música.
Eruca obtuvo tres nominaciones a los Grammy Latinos por el disco “Seremos Primavera” en las categorías: Mejor Álbum de Rock, Mejor Canción de Rock (“Creo”) y Mejor Canción Alternativa (“Carapazón”). Anteriormente había recibido dos nominaciones por el disco “Barro y Fauna” (2017) y una anterior en la categoría Mejor Canción de Rock por “Nada Salvaje” (2016).
Siete meses después de su último ensayo (en marzo de 2020) y por ultima vez en este año Lula Bertoldi, Brenda Martin y Gabriel Pedernera (productor del disco más ganador en los Gardel: “Lebón & Co.”) se vuelven a encontrar en vivo.
El sábado 10 de octubre (primera fecha del streaming) la banda volverá a sonar junta en un contexto muy especial e íntimo a través de la plataforma Nube Cultural. El encuentro tendrá varias particularidades que lo harán único, tanto es así que decidieron brindar un segundo show el día Domingo 11 para que quienes no puedan verlo en directo el sábado, puedan hacerlo al día siguiente. El trío está ensayando a la distancia material de sus seis discos, para que el público pueda pedir canciones: promete ser muy interactivo. Las entradas están a la venta en nubecultural.com.
De todo eso hablaron con la prensa argentina, y allí estuvo El Litoral para contarlo.
Academia Latina
-Este año vuelven a los Latin Grammys, con tres nominaciones.
Lula: -Tercera año no consecutivo, porque te nominan por los discos. Creo que “Huellas digitales” fue el único que no quedó nominado: “Blanco”, “Barro y fauna” y “Seremos primavera” sí estuvieron.
Brenda: -La tercera es la vencida, eso dicen.
-“Carapazón” compite con una gran diversidad de artistas: Nathy Peluso por “Buenos Aires”, Wilberto Rodríguez por “Caracoles”, Mon Laferte por “Chilango Blues”, Ile con Natalia Lafourcade por “En cantos”.
Lula: -Estar al lado de esta gente ya es un mérito y un premio en sí mismo. Gente que admiramos mucho: justo estábamos likeándonos con Nathy lo que acaba de sacar que es tremendo; Natalia nos encanta. Hay artistas con los que compartimos algunas formas de ver la música actualmente, y eso es lindo: a nivel latinoamericano, estar en esas categorías en los Grammy. Después para ganarlos juegan otras cosas. Pero estar ahí para nosotros ya es un montón.
Gabriel: -Es doblemente especial, porque el hecho de que sean reconocidas las canciones como tales es algo súper emotivo, súper importante. Cuando empezamos a hacer cualquiera de nuestros discos ponemos el foco en eso, en las canciones, en las historias que estamos contando. Es una categoría quizás más especial que la del álbum (aunque cada categoría tiene lo suyo). Que tanta gente reconozca nuestras canciones, la que forma parte de la Academia Latina de Grabación, me parece súper especial.
-¿Cómo recibieron estas nominaciones?
Lula: -Este año fue raro, medio agridulce, porque estamos en una situación muy extraña; y todos los días tratamos de entender para dónde vamos. Todas las personas estamos recalculando y viendo cómo nos adaptamos a esto. A lo cual tampoco nos queremos adaptar mucho, porque en realidad queremos que vuelva lo anterior: no sabemos cuándo va a suceder, y si va a ser de esa forma.
Pero lo recibimos con alegría, porque es un disco que para nosotros es muy importante, y que no sabíamos cómo iba a ser recibido, porque es muy bisagra: más allá de que para nosotros era natural el cambio, porque lo sentíamos, sí es un disco que despertó emociones encontradas entre el público, hay gente que lo odió y lo amó. Lo que sí nos hizo indagar en una parte de Eruca que tenía que ver con la experimentación entre los tres; el probar hacer un disco solos a ver cómo nos iba. Y también mostró un lugar íntimo.
Que tenga esta repercusión es enorme: no lo esperábamos y tampoco eso iba a determinar el éxito o no de nuestro disco. Para nosotros ya era exitoso hacer un disco así, y desde que salió nos encantó, “vamos a ver qué pasa con la gente”, y así fue evidentemente.
Está muy representada la figura del niño, de la inocencia que a la vez es muy pura y sincera y te parte al medio. Con (mi hijo) Juli estamos leyendo “El Principito”, que es difícil de bajárselo en muchos aspectos, porque es como de niños pero para adultos. Sin comparar a la banda con Antoine de Saint-Exupéry, hay mucho de eso en “Seremos primavera”: de esa inocencia que se pierde cuando sos grande, en un mundo re complejo que no tiene sentido. Lo que plantean los niños tiene más lógica que el mundo de los adultos
Sin saberlo, los tres estábamos escribiendo sobre la niñez siendo adultos, pero no a nuestros hijos; sino a nosotros, pensando en los niños que llevamos adentro (aunque suene trillado).
Reencuentro
-Si bien estuvieron haciendo cosas juntos, se van a reencontrar físicamente luego del distanciamiento pandémico.
Brenda: -Esta es la primera vez que nos vamos a juntar en el mismo lugar físicamente. Desde marzo no nos vemos, es una situación súper especial. Por eso decidimos hacerlo dos días seguidos: con una sola vez hubiera estado bien, porque no es que se va a llenar la sala, el streaming es ilimitado; pero teníamos muchas ganas de tocar, entonces decidimos armar estos dos shows especiales, únicos, diferentes entre sí. Para que los que quieran estar los dos días puedan hacerlo y puedan ver cosas distintas. Aparte porque queremos hacer un repaso por toda la discografía.
Por supuesto vamos a estar cuidando la higiene, todo lo que tenga que ver con la salud: el protocolo, la distancia. Lula está embarazada, sería un bajón: no lo dijo por esta enfermedad tan espantosa que está invadiéndonos, sino por cualquier cosa. Por eso para Cosquín Rock no estuvimos físicamente. Dijimos: “Si nos juntamos que sea una sola vez, para pasar un buen tiempo juntos”.
-Se plantean un poco como shows a la carta.
Lula: -Tienen un recorrido y hay momentos donde sorprenderemos a la audiencia con la interacción. Queremos que sea muy interactivo, y por eso nos importaba que estén conectados, no que solamente lo vean on demand. Muchas veces este tipo de eventos comprás el ticket y los podés ver después; pero la idea era que estén en vivo, viéndolo, porque vamos a hacer participar a la gente. Si no lo haríamos grabado.
Brenda: -También extrañamos el ver a la gente y el estar ahí; no es sólo el hecho de tocar, y no es lo mismo para nada grabar algo sin esa adrenalina de que si te equivocás están conectados viéndote. El vivo tiene una especie de riesgo al momento de tocar que te da una emoción especial: ese ida y vuelta de saber que está la otra persona disfrutándolo a la par se siente.
Lula: -La nota de color es el vértigo de ir a tocar sin ensayar. Yo estoy ensayando en mi casa, porque bajo ningún punto de vista podemos arriesgar ningún tipo de contacto físico. Somos muy cuidadosos con este tema: nos vamos a juntar a hacer el streaming y cada uno a su casa. Va a ser un vértigo muy divertido.
Cuando volvimos de parir con Brenda, fue nuestro primer Luna Park, en 2015, estuvimos siete meses sin tocar, pero antes ensayamos unos meses. Ahora subimos el nivel de complejidad: “Vamos a tocar los seis discos, la gente va a pedir los temas, no vamos a ensayar”.
Gabriel: -Cuando quisimos hacer un disco en vivo decidimos grabarlo en la primera vez que tocábamos las canciones en esas versiones: fue “Huellas digitales”. Generalmente cuando se graba un disco en vivo el que se graba es el último de la gira, con la banda ajustada. Por suerte salió bien. Capaz ya nos asusta nada...
-¿Qué se puede adelantar del formato?
Brenda: -Va a ser diferente. Es muy íntimo, estamos pensando también en ese recorrido visual que podemos hacer en los espacios, al ser un show filmado.
En el cuerpo
-¿Cómo se ensaya desde casa?
Gabriel: -No es que tocamos por Zoom, sino que cada persona pone la música y toca encima. Si no con el delay es re difícil, como cuando se canta el “Feliz cumpleaños” por Zoom: se empieza a generar un dominó de delays. Cada uno va preparando sus partes, y cuando finalmente nos juntemos ahí haremos el “fino”. Y ahí nos daremos cuenta de que estábamos tocando cualquier cosa.
Lula: -Cuando grabamos lo del Cosquín cada uno lo hizo con su click (metrónomo), no es que tocamos en tiempo real con el audio del otro. Cada uno se filmó y con una edición superpusimos las imágenes para que parezca que estábamos juntos. Lo más loco fue que Eruca tiene casi 13 años, y hay una cosa de la mecánica de los músculos y de la cabeza, de tocar juntos; caer juntos aunque no haya click. En el final de “El balcón” hacemos una cosa más lenta que no tiene una medida de tiempo; Gabi tenía que mezclar el audio, y le dije: “Vas a tener que editar”. No: caímos los tres juntos, hicimos lo mismo. De tanto tocar, tantas giras, adquirís como una memoria muscular.
Gabriel: -Un 99 % suerte y un 1 % fortuna (risas).
Lula: -Ensayo con los discos y reactivo mi coordinación entre lo que tengo que tocar y cantar; en siete meses perdés mucho el ejercicio, porque girar todos los fines de semana nos tenía con mucho training.
-Cuando ganaron el Gardel se cumplieron diez años del show en el Teatro Real de Córdoba, presentando “ES”. ¿Qué recuerdos tienen de aquel show?
Brenda: -Fue un show muy lindo, un gran evento en nuestras vidas. Lo primero que recuerdo fue que me caí re feo en el escenario, sobre el final del show, así que tengo una vista panorámica del teatro lleno: “Qué vergüenza pero qué hermoso”. Estábamos en la transición de venirnos a vivir a Buenos Aires, porque sentíamos que teníamos ganas de crecer; después del Real estaba el Teatro San Martín, pero nunca nos iban a dejar tocar ahí porque se iba a romper todo. Y si no era el Chateau, pero era demasiado grande.
Gabriel: -También me acuerdo con mucho cariño de ese show: fue hermoso, y post show tuvimos una conferencia de prensa: nos fuimos a una habitación con periodistas. Ese disco en particular era muy lindo de presentar para nosotros: era la primera vez que hacíamos un segundo disco con una banda en nuestra vida.
-A casi un año de haber salido “Seremos primavera”, ¿podría para 2021 salir un séptimo trabajo discográfico?
Brenda: -Como poder podría, no está en nuestros planes hoy. Estamos concentrados en hacer este streaming. Tenemos pensado presentar “Seremos primavera”, que todavía no lo hemos presentado, y en esta ocasión tampoco lo vamos a hacer. Tenemos la esperanza de ver si podemos tocar por primera vez alguna de las canciones que no hicimos en vivo de ese disco en algún escenario; así que nos estamos guardando esa situación especial para el 2021.
Vamos a ver qué pasa: si todo esto se prolonga mucho, y en el medio estamos súper inspirados y decimos “hacemos otro disco” lo haremos. Nos manejamos con la intuición.