La Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA), entidad que organiza los premios Globos de Oro, anunció este jueves una reforma estatutaria para mostrarse más abierta a la diversidad de sus miembros y combatir las sospechas de corrupción que acechan a los premios.
Entre sus cambios, los 84 miembros de la HFPA renunciarán para, luego, volver a pedir el ingreso, junto con otros periodistas que todavía no pertenecen a la entidad, en vistas de mostrar transparencia.
Luego de que medios estadounidenses denunciaran que los electores de uno de los premios más renombrados de Hollywood aceptaban regalos y viajes por parte de las casas productoras de Los Ángeles, un manto de sospecha empañó a los galardones.
Este hecho se sumo que ninguna periodista negro o negra formara parte de sus asociaciones, algo que fue mal visto no sólo por la opinión pública, sino por grandes empresas como Netflix y Amazon, que se retiraron de la competencia por los galardones.
A su vez, Tom Cruise decidió devolver sus tres Globos de Oro en modo de protesta, mientras que la cadena NBC, histórica aliada de la HFPA, anunció que no emitirá la gala de 2022. "Nos alienta la aprobación de los estatutos enmendados. Esto marca un paso positivo hacia adelante y señala la voluntad de la HFPA de hacer el trabajo necesario para un cambio significativo", dijo la NBC, aunque mantuvo su decisión.
En mayo, Netflix y Amazon publicaron cartas públicas en las que anunciaron que frenaban "toda actividad" con la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood, que organiza cada año los Globo de Oro, hasta que la institución no haga "cambios significativos" en la diversidad de sus miembros y aumente la transparencia de su funcionamiento interno.
Otras cuestiones que salieron a la luz a partir de la investigación de Los Ángeles Times apuntaban a la posición de poder que ejerce la Asociación de la Prensa Extranjera, y que le permite no solo obtener acceso privilegiado a las estrellas en detrimento de otros colegas, sino también a lujosos viajes, fastuosos regalos y suculentos salarios.
En cuanto al rating, según números publicados por Variety, la gala de este año perdió 11 millones de televidentes, una merma de más del 50%, que también sufrió la televisación de los Oscar y, en menor medida, los Grammy y los Emmy.