Domingo 27.6.2021
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El director y guionista M. Night Shyamalan divide aguas, cómo si fuera una especie de Moisés del cine frente al Mar Rojo. Están los que adoran sus películas y las esperan con ansiedad, en la certeza de que tienen altas chances de convertirse en obras de culto. Y en la otra orilla están aquellos que cuestionan su pomposo estilo, la explícita manipulación del espectador y los giros inesperados que, pese a que ya son una marca registrada del autor, suelen resultar poco convincentes.
Lo cierto es que, en un intento de franquear esas discordias, es necesario remarcar que las películas del indio-estadounidense no dejan indiferente a nadie, algo que en las expresiones artísticas en general suele ser favorable. En 1999, con poca experiencia a sus espaldas, reformuló las historias de fantasmas con “Sexto sentido”, que pese a todo pronóstico resultó un éxito de taquilla descomunal y se convirtió en una de las poquísimas películas de terror (junto con “Tiburón”, “El exorcista” y “El silencio de los inocentes”) en quedar nominada al Oscar. El film que popularizó la frase “Veo gente muerta”, le abrió la llave de los grandes estudios de Hollywood. Y lo que vino después fue una trayectoria irregular.
De la cima al fondo del valle
“El protegido”, su siguiente proyecto, representa para muchos la obra más personal y lograda de Shyamalan. Se trata de una inteligente historia que homenajea al universo del cómic a través de un hombre (Bruce Willis) que descubre que es invencible tras sobrevivir a un terrible accidente ferroviario en el que mueren todos los demás pasajeros. Además de delinear a sus personajes como si fueran héroes o villanos, pero en una vida real y cotidiana, Shyamalan realiza un trabajo de cámaras que rinde culto a la historieta desde lo formal, es decir que las escenas están enmarcadas por elementos poligonales para brindar la sensación de que ocurren dentro de viñetas. El director avanzó en premisas similares (de hecho, al principio había concebido como una trilogía) en “Fragmentado” (2016) y “Glass” (2019), hasta el momento su último film estrenado en las salas, hace más de dos años.
Universal Pictures“Señales” (2002) emula a “La guerra de los mundos” de Welles pero visualiza la invasión marciana desde la óptica de una familia con diversos problemas que habita en una zona rural de Estados Unidos. “La aldea” (2004) propone una trama fantástica también en un entorno agreste, con una especie de monstruos que aterran a los habitantes de un pueblito, aunque el giro final demuestra que las cosas son muy diferentes. Este último film es considerado tanto una obra maestra como un trabajo flojo a pesar de su gran reparto de actores y su riqueza visual. “La dama del agua” (2006) que imagina una trama mitológica (Bryce Dallas Howard encarna a una ninfa) que se desarrolla en un bloque de departamentos, recuerda en parte a los filmes de Guillermo del Toro en su mezcla de fantasía y realidad, aunque la premisa creativa pronto pierde fuerza.
“El fin de los tiempos” (2008), “El último maestro del aire” (2010) y “Después de la tierra” (2013) fueron intentos fallidos del director por introducirse en vertientes diversas de la ciencia ficción, ya exploradas con mayor fortuna por otros realizadores. Recién pudo recuperar algo del prestigio perdido gracias a la pequeña pero sugestiva “Los huéspedes”, que retoma las claves principales del cuento “Hansel y Gretel” y las adapta, con gran sentido del humor, a la era de los teléfonos móviles y las redes sociales.
Universal PicturesEn “Viejos”, que se estrenará en julio, Shyamalan parece haber retornado al estilo que lo diferenció desde “Sexto sentido”. Al menos las imágenes que se conocen hasta el momento destilan esmero en la creación de atmósferas y esbozan una trama entre fantástica y terrorífica. Además, hay un retorno a los terrenos de la novela gráfica, en este caso la elaborada por Pierre-Oscar Lévy y Frederick Peeters.
Gael García Bernal, Eliza Scanlen, Thomasin McKenzie y Rufus Sewell son los actores de este thriller que se focaliza en una familia que, de vacaciones en un paraíso tropical, descubre que la playa elegida los hace envejecer rápidamente.
Universal PicturesUn aspecto interesante es que el film se rodó por completo durante la pandemia, en República Dominicana, con un sistema innovador que ideó el propio Shyamalan. “Estaba haciendo las reglas porque yo era el primero, así que dije: ‘Todos nos vamos a quedar en el hotel’. Pagaré por todos: las señoras de la limpieza, las empresas de catering, la recepcionista, todos los que se quedan con nosotros, y si se apegan a esas diez semanas, cubriré todo e ir del hotel a la playa, ida y vuelta, todos los días”, contó el propio director a medios norteamericanos. La idea pareció funcionar, ya que en el rodaje no hubo casos positivos de Covid19. Lo cierto es que la posibilidad de reencontrarse con Shyamalan en sus mejores registros ya despertó el interés de los cinéfilos de todo el mundo.
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