En 2021 los galvenses se sorprendieron gratamente al ser elegida su ciudad para una película del cineasta José Celestino Campusano –“Vil Romance”, “Vikingos”, “Fango”, “El perro Molina” y “Placer y Martirio”, entre otros filmes-.
Fue elegida por el director de 26 películas, José Campusano, para rodar una historia fuerte, dura, de superación de una mujer que se involucra en la vida social de una ciudad-pueblo con todo lo que eso significa. Paisajes, actores y orgullo para esta localidad que espera ansiosa su propia avant premier.
En 2021 los galvenses se sorprendieron gratamente al ser elegida su ciudad para una película del cineasta José Celestino Campusano –“Vil Romance”, “Vikingos”, “Fango”, “El perro Molina” y “Placer y Martirio”, entre otros filmes-.
Fue así que este jueves se estrenó “La Reina Desnuda”, filmada íntegramente en la ciudad de Gálvez, departamento San Jerónimo, localidad ubicada a 80 kilómetros de Santa Fe, y que además contó con extras y participantes de la película del propio lugar y de la región.
Con más de 100 actores en escena y protagonizada por Natalia Page, Dolores Moriondo, Alek Molnar, Joaquín Colombo, Franco Ganuza, Sergio Darío Luna Molina, Norma Ana Zeiter, Victoria Rolando González, y Juliana Montecchia “La Reina Desnuda” contextualiza situaciones conflictivas desde lo social, en localidades chicas. Entre otras cosas, hace referencia a violencia de género, homofobia, desigualdades de todo tipo y el desempeño de una mujer en un contexto pacato y prejuicioso.
El personaje principal se llama Victoria, interpretado por Natalia Page. Una mujer liberal en una ciudad pequeña del interior de la provincia de Santa Fe, con un pasado lleno de dolores como el abuso y el maltrato, el personaje pone sobre escena una poderosa personalidad y revive dos frases muy conocidas: “Pueblo chico, infierno grande” y “Nos conocemos todos”.
Justamente, el director quiere remarcar que una mujer puede hacer con su vida sexual lo que le plazca, atendiendo que los hombres siempre lo han hecho y la diferencia principal entre una actitud y la otra es la descalificación para unas y las palmas para otros, ante las mismas acciones.
Con disputas y relaciones cotidianas y cambiantes, la vida real de Victoria en Gálvez se entrecruza con permanentes desafíos para la mujer adulta que es hoy, con los resabios de lo que fue en la adolescencia y con el condimento de ser trabajadora municipal vinculada con la ayuda a personas que han sufrido abusos machistas.
Cuando se comenzó a rodar el filme, allá por marzo de 2021, todavía con los temores a cuestas por la pandemia de coronavirus, Portal de Medios de Gálvez publicaba una entrevista de Campusano con Buen Santa Fe: «Desde que existe la productora Cinebruto nos hemos encargado de trasladar la actividad a otras provincias, pero también a otros países. No creemos que todo tenga que nacer o morir en Buenos Aires. No nos interesa esa postura en absoluto. De hecho, cuando viajamos, parte o la totalidad del elenco es local” dijo Campusano, cosa que finalmente cumplió.
Con respecto a la película, contó que “la historia se construye hacia el aporte de adultos jóvenes que han sido partícipes o testigos presenciales de ciertas experiencias que tienen que ver con conflictos de adaptabilidad en esta sociedad de hoy” y “hemos hecho este desembarco técnico-artístico en Gálvez. En base a ciertas entrevistas surgió esta temática, presentamos el guión al INCAA, felizmente fue aprobado. Tiene que ver con seguir un proceso bastante tradicional: entablar vinculación con las autoridades en lo municipal, lo provincial. Hacer un primer casting. Y después, hablar con referentes del lugar, recorrer locaciones. Nos encanta trabajar con las comunidades. Es un tesoro, algo que no te olvidás nunca. Con todo lo digital reinando en el ámbito de las comunicaciones, no es tan difícil hacer una película. Difícil es otra cosa. El digital trae justicia en esto de federalizar la actividad”.
Gálvez está expectante al avant premier de la película, con la visita de Campusano prometida y todas las funciones de domingo y lunes agotadas. Más allá de la historia, es un orgullo que en el celuloide quedará inmortalizada la Vieja Iglesia, todo un símbolo de Gálvez, y varios paisajes de unas de las tres ciudades del departamento San Jerónimo.