Del estupor a la razón
"Rey Piojo", de Fabricio Simeoni. Los Lanzallamas, Rosario, 2001.
A falta de definición establecida y de mejor definición, estos poemas de Fabricio Simeoni podrían denominarse reflexivos, o filosóficos, si en poesía estas acepciones no conllevaran connotaciones de frialdad, altanería, ausencia de imágenes, defectos todos ausentes en el libro de Simeoni. Versos y poemas breves conforman Rey Piojo, donde prima la ironía, la mirada al sesgo, la asociación de ideas que consienten la "anatomía del lenguaje" y la anatomía de la existencia.
Hay personajes absurdos y retratados con pinceladas netas y cómicas, como los que aparecen en la sección titulada "Mujeres", en la que aparece una mujercampana, una mujerescoba, una mujersangre o una mujer@rroba. Hay especulaciones metafísicas, metalingüísticas y metagóges sobre objetos: carritos, bicicletas, gotas, espejos, cruces. Y también todo un capítulo dedicado a animales, desde la ballena ("Llena de costas/ en la profundidad azul/ de sus ovarios/ gesta un mar") hasta el Rey Piojo que da título al libro ("Sucesor del ácaro/ emerge del vinagre/ para heredar miserias").
Poesía "inteligente" sería quizás el término más adecuado para resumir a la que ofrece este libro, una poesía que busca un lector cómplice, avisado, entregado al juego que permite el regreso a la razón tras la experiencia de la contemplación y del estupor.
Marcos Rébora