Atenas se consagró campeón
Se despidió un grande: Marcelo Milanesio. Atenas derrotó a Estudiantes de Olavarría por 87 a 81. El equipo cordobés es el más ganador en el historial de la Liga Nacional.
De la mano de su capitán y conductor Marcelo Milanesio, en la noche de su despedida, Atenas de Córdoba obtuvo ayer su séptimo título en la Liga Nacional de Básquetbol, al derrotar a Estudiantes de Olavarría por 87-81 y sellar la serie final de la temporada 2001-2002 con un indescontable 4-1.
Los cordobeses festejaron este nuevo logro fervientemente apoyados por 4 mil asistentes y el Polideportivo Carlos Cerutti de la capital mediterránea fue testigo del quinto encuentro final, que se resolvió con parciales de 26-16, 43-34 y 61-55.
La decisiva participación del símbolo "griego", Marcelo Milanesio (cerró su brillante carrera como profesional con 848 partidos jugados en la Liga local) le permitió apoderarse del título al quinteto local.
Estudiantes, dirigido por el "Oveja" Sergio Hernández, cumplió un dignísimo papel y estuvo a punto de trocar la fiesta en incertidumbre, cuando se puso un punto abajo (67-68), al promediar el cuarto parcial.
Sin embargo, un triple y dos bandejas consecutivas del ídolo cordobés enderezaron el camino en favor de Atenas.
El partido, con aristas de gran final, no fue vistosamente jugado pero tuvo la emotividad y la intensidad deseada.
En el arranque, Atenas impuso su ritmo, con un Bruno Lábaque imparable que le otorgó al ganador un parcial de 26-16 al término del primer segmento.
La regularidad de Leonardo Gutiérrez y Walter Herrmann en ataque y la labor debajo de los tableros de Stanley Easterling se erigieron, después, en los argumentos de victoria.
Estudiantes opuso su mejor funcionamiento en la segunda mitad, cuando Gabriel Díaz -con una seguidilla de conversiones- puso a los bonaerenses un punto por debajo (50-51), a los 6 minutos del tercer cuarto.
Sin embargo, la quinta infracción personal del tucumano conspiró contra los intereses del "Bataraz" y le dejó el camino expedito a un Atenas que reguló el ritmo.
En el quinteto cordobés también se destacó el "Gringo" Andrés Pelussi, quien aportó 10 tantos en el segundo tiempo, opacando la tarea del pivote cordobés Diego Osella, quien apenas reunió 6 puntos (1 de 5 en dobles, 1 de 2 en libres y 1 de 1 en triples) y tuvo una jornada para el olvido.
Por otra parte, Estudiantes tuvo que lidiar con las intermitencias que mostraron Sebastián "Sepo" Ginóbili y Paolo Quinteros, quienes no lucieron efectivos durante todo el desarrollo y perjudicaron a su equipo.
Todas estas situaciones fueron aprovechadas por un Milanesio que estuvo en "capilla" con cuatro faltas durante el último segmento, pero que sacó a relucir su capacidad y ahuyentó los fantasmas que se posaron en el Cerutti.
Recién cuando restaban 10 segundos y con el estruendoso festejo de la afición local, el otrora bicampeón "entregó" el partido con el 81-87 que quedó marcado a fuego y que permitió a Atenas sumar su séptima corona.
El experimentado jugador de Atenas de Córdoba, Marcelo Milanesio, quien anoche puso fin a su extensa carrera deportiva luego de que su equipo se coronara campeón de la Liga Nacional de Básquetbol afirmó que "tenía que retirarme ganando el título".
"Tenía que terminar mi carrera campeón. Y agradezco a Dios y al público de Atenas todo lo que me ha dado durante estos años", dijo Milanesio luego del encuentro, al cerrar su exitosa carrera con un nuevo título, el séptimo en la historia personal y de su equipo.
El base destacó el valor que mostró el conjunto "griego" a lo largo de la temporada, que terminó en coronación anoche, con el triunfo por 87-81 sobre el "Bataraz", en el quinto enfrentamiento de la serie disputada en el Polideportivo Carlos Cerutti de Córdoba.
"Estoy agradecido por todo. Este equipo demostró personalidad y contó con un grupo de jugadores jóvenes que pelearon con garra para lograr la victoria. Les agradezco, porque me ayudaron a terminar mi carrera como siempre lo soñé: campeón", agregó Milanesio.
"Es un orgullo para mí haber vestido la camiseta de Atenas. El público siempre fue afectuoso conmigo, y por eso tengo una relación muy especial con los cordobeses", concluyó.
Por su parte, el base Bruno Lábaque dijo que "(Marcelo) Milanesio es el más grande. Estoy feliz por esta victoria y porque él me enseñó muchas cosas".
"El equipo tuvo momentos malos durante la temporada. Hubo tres meses en los que las cosas nos salieron mal, pero el grupo siempre estuvo unido y salió del pozo", agregó el base.
Finalmente, Lábaque afirmó que "este equipo está conformado por un grupo de amigos. Por eso terminamos ganando. Pero reconozco que sólo me sentí campeón cuando faltaban diez segundos para el final y Marcelo (Milanesio) tomó la pelota", concluyó el base del equipo "griego".