Bélgica quedó mal parada
Empató 1 a 1 con una débil Túnez. Con este resultado se complicaron sus chances, ya que ahora debe ganarle a Rusia.
La selección de Bélgica desperdició una importante oportunidad de acercarse a los octavos de final de la Copa del Mundo, al igualar hoy 1 a 1 con Túnez, en partido que inauguró la sede de Oita en el grupo H.
Los belgas, que empezaron siendo muy superiores en el arranque y se pusieron rápidamente en ventaja por intermedio de una de sus figuras, Marc Wilmots, quien a los 13 minutos aprovechó una indecisión del arquero Alí Boumnijel para abrir el marcador, después se fueron quedando sin historia y dejaron en el camino dos puntos vitales.
La decaída belga comenzó cuatro minutos después del gol propio, cuando a los 17 Raouf Bouzaiene ejecutó en forma magnífica un tiro libre. Aunque todavía quedaban tres cuartos de partido por jugarse, lo posterior al empate fue de una pobreza total. Así, afloraron las naturales limitaciones técnicas de los tunecinos y eso, sumado al conservadurismo táctico de los belgas, generó un partido de pésimo nivel.
Eso se extendió al segundo tiempo, cuando los registros frente a los arcos no pasaron de aproximaciones repartidas, que insinuaron más de lo que realmente podían concretar.
El final mostró a Túnez celebrando su primer punto en el Mundial al cabo de una actuación digna; mientras que para Bélgica fue la decepción de una clasificación que ahora se torna muy complicada.
