Un buen número de participantes registraron las competencias para los puros, en tanto que las cuadreras no colmaron las expectativas creadas el domingo pasado en la reunión hípica de Las Flores, donde se desarrolló sobre pista normal la cuarta jornada de la temporada. En ella, el público no fue el esperado, considerando que el programa ofrecido fue interesante, sobre todo el clásico obtenido por el caballo Español II, que se impuso sobre el favorito Chiste.
La venta final rondó los 30 mil pesos, distando de los 70 mil recaudados en la jornada del 6 de marzo, cuando se disputó el clásico Iturraspe y un vibrante compromiso para ejemplares cuartos de milla, ganado por Caranchín.
Una notable impresión causó el tres años Ockham, que reapareció tras algunos meses de inactividad, luego de su fallido intento porteño en el clásico Provincias Unidas.
El representante de la caballeriza Marita logró derrotar por el pescuezo al entrerriano Secret Parade, mientras otro de la vecina orilla, Love Yale, se quedaba con la tercera ubicación, a la par que fallaba rotundamente el favorito Prince Andrew, que había sido elegido ampliamente por la cátedra.
El jinete Juan Alberto Márquez cumplió en gran forma en la montura del ganador, apuntando que el propio Márquez también es el entrenador del vástago de Diddler. El piloto se mantuvo expectante en el desarrollo y, a poco de pisar la recta final, empezó a exigir a su pupilo, que poco a poco fue quebrando la resistencia del ejemplar atendido en Paraná, para conseguir un pescuezo en la sentencia, dejando una muy buena imagen, sobre todo, si se tiene en cuenta su regreso a la arena, tras un tiempo importante -cuatro meses- de inactividad.
El cronómetro marcó 1 minuto 12 segundos 4/5 para recorrer las doce cuadreras, un rendimiento en realidad muy bueno para un ejemplar que reaparecía y que, en una corta campaña, ya mostró tener grandes cualidades, por lo que seguramente muy pronto volverá a intentar suerte en los escenarios mayores.
También fue interesante la entrega de Secret Parade, caballo que tuvo una gran mejoría con respecto a anteriores presentaciones en las cuales había participado fuera de categoría; el domingo y en un lote exigente exigió a ultranza a ganador.
La yegua Luisina Halo volvió a prevalecer ayer sobre la generación menor, quedándose en vibrante y reñido final con un trabajoso triunfo sobre Anjiz Stara la que aventajó por un hocico, arribando a tan sólo 1/2 pescuezo de ambas Panacea, que supo aprovechar el estado de la cancha barrosa para acercarse mucho más de lo previsto a la reservada del haras Firmamento.
La conducida por Damián Ramella ganó de una punta a la otra el clásico General Francisco B. Bosch, listado, empleando un registro de 55' 42/100 para descontar el tiro del kilómetro, marca que es más que aceptable, porque al momento de la disputa un fuerte viento en contra de la recta demandaba un mayor esfuerzo a las yeguas participantes, además de ser un terreno no muy apto para mejorar las marcas.
La pupila de Miguel García ya había superado a Panacea -ahora tercera a hocico y 1/2 pescuezo de distancia- por 5 cuerpos, cuando ambas se encontraron a comienzos de marzo próximo pasado, y allí, la hija de Louis Quatorze le ganó cómodamente por 5 largos, sumando entonces su segunda victoria dentro de la campaña 2005, porque había ganado a mediados de enero un cotejo Handicap, por 5 cuerpos sobre Last Querida.
Dos fustas sobresalieron en la reunión del domingo en nuestro medio: Claudio Díaz que además de ganar el clásico con Español II, logró quedarse con la segunda prueba al imponerse con Popeye en una cuadrera, y Juan Alberto Márquez que ganó dos carreras de codo con dos de sus pupilos; Okcham y General John, con la particularidad que en ambas se impuso por el pescuezo, accionando de atrás.
Juan Raúl Moncada