El caso Desábato

El jugador Leandro Desábato, de Quilmes, no habría cometido las ofensas racistas denunciadas por su colega brasileño Grafite, que le costaron 37 horas de prisión en San Pablo además de un proceso judicial, según nuevos documentos y una investigación de un medio local.

Una pesquisa impulsada por el diario Folha de Sao Paulo sostuvo que un testigo hablaba de ""acuerdo entre la Policía y el (club) Sao Paulo", pero además por su propia vía llevó a peritos videos del incidente y éstos determinaron que Desábato no le espetó ofensas racistas a Grafite.

Desábato, liberado provisionalmente bajo fianza y con un compromiso para comparecer ante la justicia cuando le sea solicitado, no fue inculpado por ofensas racistas contra Grafite, según el informe del juez uruguayo Martín Vázquez.