Según las más recientes proyecciones 2005/2007 elaboradas por la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (Fiel), la economía argentina volverá a crecer a tasas elevadas en el corriente año, para desacelerarse a partir del próximo tanto por factores externos como domésticos.
Según el informe FMF (Fiel Macroeconomic Forecasts), el crecimiento en 2005 será de 7.5% en el escenario más probable. Esta proyección supera en poco más de un punto porcentual las proyecciones oficiales, así como el promedio del mercado que se estima en 6.7% según el último informe del REM del Banco Central.
El crecimiento estaría impulsado por un aumento de algo más de 17% en la inversión bruta, que llevaría la tasa de inversión al 19.3%, nivel que sin embargo resulta aún bajo para mantener una tasa elevada de expansión en años subsiguientes.
Se estima que las exportaciones de bienes y servicios crecerán en forma apreciable en el período 2005/07, impulsadas tanto por un aumento de las cantidades vendidas como por un buen escenario de precios para las principales commodities. Un indicador del favorable contexto internacional que sostiene las proyecciones viene dado porque en todos los escenarios se estima una mejora en los términos del intercambio, es decir en la relación de precios entre los bienes y servicios exportados y los importados.
Las proyecciones están condicionadas al mantenimiento de un escenario externo relativamente favorable, tanto en precios como en materia de actividad mundial, a pesar de estimarse un sendero creciente de tasas de interés durante 2005 y parte de 2006.
En el plano de las políticas domésticas, la principal diferencia entre escenarios que dan lugar a mayor o menor crecimiento está dada por la rapidez o lentitud con que se normalizan las relaciones financieras de la Argentina, es decir con el cierre más o menos exitoso del proceso de canje de deuda (incluyendo deuda aún en default) y las relaciones con los organismos multilaterales de crédito.
Por otro lado, la mayor o menor disciplina fiscal y monetaria son factores de importancia que pueden generar sustanciales diferencias en términos de crecimiento, desempleo y evolución de la inflación. En el escenario más probable se proyecta una inflación promedio anual de 9.4%, que sin embargo promedia el 10.8% en el último trimestre del año.