Constitución europea

El referéndum francés pone en juego el futuro de Europa

"Sí" o "no". Las encuestas dan ganador al "no", pero también se especulaba con un resultado muy ajustado. AGENCIA AFP. 

El índice de participación en el referéndum francés sobre la Constitución europea era del 25,08 %, al cierre de esta edición. Más de 40 millones de franceses votaban hoy por "sí" o "no".

EFE-AFP

Los franceses se decantan hoy en referéndum a favor o en contra de la Constitución europea, un voto crucial que mantiene en vilo a Europa y a toda Francia y en el que cualquier resultado es posible.

Un suspenso que se desvelará a partir de las 22 locales, cuando cierren los colegios electorales de París y Lyon que abrirán dos horas más que en el resto de Francia.

Menos de 48 horas antes del escrutinio, el "no" se situaba entre el 51 y el 56 por ciento de las intenciones de voto.

El hecho de que uno de cada cinco franceses se declarase indeciso alienta la esperanza de los que trabajaron por el "sí", integrados en una amplia coalición de las principales fuerzas políticas: la conservadora y gobernante UMP, los centro-liberales de UDF y la mayor parte de los socialistas y de los Verdes.

En mente tienen también el referéndum sobre el Tratado de Maastricht de 1992, cuando, tras una campaña incierta, el "sí" se impuso con un ajustado 51,04 por ciento.

Las urnas repartidas en unos 60.000 colegios electorales están a disposición de los más de 40 millones de electores desde las 8 locales en la Francia metropolitana, mientras que los más de 1,4 millones de residentes en los departamentos y territorios de ultramar votaron la víspera o terminarán de hacerlo en las próximas horas.

25,08 % de participación

La participación, al cierre de esta edición, era del 25,08 %, informó el Ministerio del Interior.

Se trata de un porcentaje bastante superior al registrado a la misma hora en el referéndum de 1992 sobre el Tratado de Maastricht, que fue del 20,39 %, y en las elecciones al Parlamento Europeo (PE) del 13 de junio pasado, que apenas fue del 13,56 %.

La abstención más alta en los nueve referéndum anteriores celebrados en la V República se registró en el anterior, del 24 de setiembre de 2000, sobre el quinquenio, convocado también por el presidente Jacques Chirac, y que fue del 69,81 %.

Sólo en uno de esos nueve referéndum (reforma del Senado, en 1969) ganó el "no" y supuso la marcha del general Charles de Gaulle.

El escrutinio que obtuvo el mejor resultado fue sobre la ratificación de los acuerdos de Evian, el 8 de abril de 1962, en el que el "sí" cosechó el 90,81 % de los sufragios.

Chirac y su esposa, Bernardette, votaron en torno a las 11 locales en Sarran, localidad situada en su feudo de Correze (centro de Francia), donde ella es consejera general.

Ni Chirac ni su esposa, ambos vestidos con trajes grises y camisas blancas, hicieron declaraciones, aunque sí firmaron libros y fotos durante aproximadamente media hora y saludaron a las personas presentes en el colegio electoral.

"Todo es posible"

Media hora después, el jefe de la oposición, el socialista Francois Hollande, que también ha hecho campaña por el "sí", votó en la misma región y, en concreto, en Tulle, donde es alcalde. "Todo es posible", se limitó a decir a la prensa un sonriente Hollande, que vestía un traje azul oscuro y camisa blanca.

Diez minutos antes del mediodía, el "número dos" del PS y uno de los principales abanderados de la izquierda por el "no", Laurent Fabius, depositó su papeleta en la localidad de Grand-Quevilly (noroeste), donde es teniente de alcalde. "No he previsto ninguna declaración, sea cual sea el resultado", dijo el ex primer ministro, cuya postura le encuadra en una dispar coalición de comunistas, ultraizquierdistas y ultraderechistas, soberanistas y disidentes socialistas y ecologistas.

Toda Europa está pendiente del veredicto de las urnas, ya que un "no" francés sería fatal para el primer Tratado constitucional europeo elaborado para facilitar a partir de 2007 el funcionamiento de una Unión Europea de 27 países.

Seguirá en el cargo

Chirac, que ha llamado a la "responsabilidad" de sus conciudadanos y que insiste en que un "no" debilitará a Francia y a Europa, ha dejado claro que seguirá en el cargo sea cual sea el resultado, pero implícitamente sentenció la suerte de su primer ministro, Jean-Pierre Raffarin, de quien parece que prescindirá después de tres años de leales servicios.

Fue precisamente en el colegio electoral de Chasseneuil-du-Poitou (oeste) donde debía votar Raffarin, cuya popularidad está por los suelos, donde se ha registrado el único incidente de la jornada, pues ante sus puertas se ha instalado un grupo de manifestantes opuestos al tren de alta velocidad del Atlántico.

Según la prensa, Chirac encargará el "nuevo impulso" gubernamental que ha prometido al ministro de Interior, Dominique de Villepin, quien habría elaborado ya su discurso de política general y tendría formado su gobierno desde hace dos meses.

La ministra de Defensa, Michele Alliot-Marie, y el presidente de la UMP, Nicolas Sarkozy, también parece que tienen opciones.

Fuerte abstención

La abstención en el referéndum francés sobre la Constitución europea superó el 70 % en los tres departamentos franceses de ultramar (Martinica, Guadalupe y Guayana), donde sus habitantes votaron ayer, aunque fue inferior a la registrada en 1992 en el voto sobre el Tratado de Maastricht.

Según los datos comunicados hoy por el Ministerio del Interior, un 28,37 % de los electores de Martinica han participado en el escrutinio (sólo 24,4 % en 1992), lo que supone una abstención del 71,63 %.

En Guadalupe, el índice de participación alcanzó el 22,21 % (un 16,66 % en 1992), lo que supone un 77,79 % de abstención.

El 23,15 % de los electores de Guayana votaron ayer (un 18,77 % en 1992) y se abstuvieron el 76,85 %.

En los territorios de ultramar, la participación más alta se registró en Saint-Pierre-et-Michelon, donde votaron el 39,11 % de los electores.