El rock volvió con formato de festival a nuestra ciudad. Anoche 6.000 almas revivieron una de las fiestas más convocantes del rock nacional: el Quilmes Rock, que en esta edición encontró a todos sus seguidores en la Sociedad Rural. Desde las 17 y hasta la medianoche se vivió mucho más que rock: Ramset, Bulldog, Kapanga, Almafuerte, Attaque 77 y Las Pelotas fueron las bandas presentes.
Las puertas se abrieron desde temprano para dar lugar a la banda ganadora del concurso local para esta edición del festival; Ramset subió a escena a las 17. Minutos después, cuando los primeros acordes de Bulldog -la banda rosarina punk del momento- sonaron en las inmediaciones de bulevar, el público le dio forma interminable a la cola de ingreso, que para esa hora llegaba hasta la esquina de López y Planes.
Brazos en alto, los seguidores dijeron presente haciendo el aguante. Detrás, el público se iba acomodando para esperar una larga noche rockera, sin más intenciones que disfrutar y escuchar una vez más a sus bandas favoritas. íGracias por sus voces loco!, gritó "Mantu", la voz líder de Bulldog y los cuerpos comenzaron a saltar.
Alegría y diversión
Cuando todavía el sol desplegaba su calor subió al escenario Kapanga y la multitud no se hizo esperar: al ritmo de "El Universal" la masa acompañó a su ídolo. Lo siguió, lo aplaudió, le festejó cada una de sus interpretaciones -como una versión de Las Divinas de Patito Feo en el clásico de los vivos "cuchá cuchá"- y le dio el mismo fervor que siempre. "Por suerte, a los santafesinos que vinieron a vernos, les vamos a presentar un disco nuevo" comentó el Mono y acto seguido comenzaron a sonar temas como "Contramano", de su última placa "Crece".
El polvo estaba en el aire cuando una hora después de los saltos y el agite, Almafuerte rompió el escenario. Con su habitual vestimenta negra, sus muñequeras en cada brazo y su voz imponente, Iorio se dio el lujo de convocar entre tanto rock a los más acérrimos seguidores del Heavy Metal, que desde temprano esperaban por su máximo referente. El coro gritaba "ole lé, ola lá, Iorio es lo más grande del heavy nacional" y algunas banderas incipientes (casi todas en celeste y blanco) se alzaban frente al escenario.
Attaque y un cierre perfecto
La noche ya se cerraba y las luces jugaban a ponerle color a un escenario que vibró con lo mejor del punk de la mano de Ciro Pertusi, Mariano Martínez, Leo de Cecco y Luciano Scaglione. Fue el momento más convocante de la noche. No cabían almas solitarias, todos eran uno y el cielo no se hizo esperar y los dejó brillar durante una hora y media de show.
No podía ser de otra manera, no cabía otra forma de culminar una noche como la de anoche. A las 22.20, cuando el fervor había invadido cada uno de los cuerpos, Las Pelotas salió a escena y explotó largando en el escenario el tema que le da nombre a su última placa íBasta! Desde allí hasta la medianoche, fue una invasión de rock.
Alina Pozzolo
