Con estilo propio

Más que estar siempre a la moda, es importante encontrar un rasgo personal en la forma de vestir. TEXTO. EUGENIA CORREA. FUENTE WWW.AR.MUJER.YAHOO.COM. FOTO. EL LITORAL

Muchas veces nos sentimos tentadas de usar lo que está de moda, sin pensar si ese corte favorece nuestra figura, si nos gusta o si dice de nosotros lo que queremos reflejar. Sin embargo, una mujer no se ve bien cuando está a la moda sino cuando tiene estilo propio, que es el lenguaje que ayuda a expresar quién es o cómo se siente.

Pero, ¿cómo se crea un estilo? No es cosa sencilla; por eso tanto políticos como celebridades muchas veces recurren a vestuaristas profesionales que los ayudan a crear una imagen definida y que además comunique lo que desean. Una mujer política necesita expresar seriedad y confiabilidad mientras que una celebridad debe mostrarse única, original y relajada. Pero lo que ambas deben conseguir es cierta continuidad en sus elecciones para que, aún sin ver su rostro, se pueda saber quién es quién con tan solo observar su atuendo.

Esto, por supuesto, no significa que sea imposible que cualquiera de nosotras desarrolle un estilo propio. De hecho, ni siquiera se tienen que gastar fortunas para lograrlo. Lo único que hay que hacer es fijarse un poco más en qué nos ponemos y qué prendas vamos agregando a nuestro guardarropa para comunicar los mensajes correctos.

ALGUNAS IDEAS

Un primer paso es comprar ropa para la vida que tienes y no para la vida que te gustaría tener. Esto es algo especialmente importante en estos tiempos económicos complicados pues te impedirá gastar en cosas que no vas a usar.

Por ejemplo, si trabajas en una oficina y para eso necesitas trajes con saco, algo que comunique tu nivel y responsabilidad, entonces ésto es lo que más debes tener en tu ropero. Pero no se trata de verte igual todos los días o que tu guardarropa sea algo aburrido.

El punto es que debes tener en cuenta que ese es tu estilo, es lo que haces y como te sientes cómoda la mayor parte del día. Sin embargo, conviene hacer algunas variaciones y experimentos sobre esa forma de vestir. De ese modo quizá los sacos se conviertan en tu marca personal, pero entonces debes comprarlos de diferentes colores, texturas, cortes o mangas.

Esto es importante pues, si no, estarás comprando ropa quizá muy original pero que se quedará guardada pues no estará acorde con tu vida cotidiana.

Compra para combinar. Siempre que compres una prenda, piensa si lo puedes combinar con -al menos- otras tres cosas que ya están en tu guardarropa. De esta forma irás formando conjuntos que definirán un estilo y además toda tu ropa tendrá más combinaciones y será mucho más versátil. Así no tienes que tener tantas cosas pero si muchas mezclas que se ven distintas, según se vayan adecuando a distintas ocasiones. Recuerda que, en la creación de un estilo propio, menos es más.

LOS INFALTABLES

Un guardarropas básico debería incluir un pantalón de vestir negro, un traje sastre de tono neutro, tres pantalones de tonos clásicos, tres faldas de invierno/verano (las que llegan por debajo de la rodilla son muy sentadoras), camisas de algodón -si son blancas mejor ya que aportan simplicidad y frescura-, un impermeable, jeans, un vestido negro, suéters de colores neutros y con cuellos diferentes, blazers para distintas estaciones, un abrigo de lana a la rodilla, carteras de colores clásicos y una del color de moda, un par de zapatos negros de taco y otro al tono con la temporada, un par de botas negras y un abrigo de color neutro al que se podrá sumar uno de color.

el toque final

Los accesorios son fundamentales para crear un sello personal ya que permiten jugar y darle un giro especial a tu look, tanto si quieres llamar la atención como si tienes una cita de trabajo.

Una diadema de color puede darle un toque especial a un vestido negro y lograr un balance entre la coquetería y una ocasión que requiera más frialdad. Antes de ponerte cualquier accesorio pregúntate qué quieres decir ese día y eso te dará la respuesta a lo que debes usar.