Las napas están altas y los canales pluviales en malas condiciones
Vecinos de La Guardia Centro temen consecuencias ante prolongadas lluvias
La ejecución de desagües, la limpieza de canales existentes, la colocación de bombas extractoras de agua y la realización de trabajos que contribuyan a minimizar los efectos por lluvias son algunos de los reclamos a la Municipalidad.
Llenos de malezas y rebasados de agua es como se encuentran los pocos canales a cielo abierto que tiene el barrio.
Foto: Luis Cetraro
De la Redacción de El Litoral
“La crecida del Paraná no es lo que más nos preocupa a los vecinos de La Guardia Centro, ya que estamos dentro del anillo defensivo, sino que llueva de manera sostenida durante varios días. Es que, debido al pésimo estado en el que se encuentran los pocos canales a cielo abierto que tiene el barrio y el hecho de que las napas están altas, el agua de lluvia no tiene por dónde salir”. Con esas palabras, Alberto Gauna manifestó la principal inquietud de los habitantes del barrio costero, muchos de los cuales reconocieron pasar horas en vela cuando hay mal tiempo, porque temen que el agua ingrese a sus domicilios.
Fue a pocos metros de la capilla Nuestra Señora de la Guardia que un grupo de vecinos convocó a El Litoral para solicitarle a la Municipalidad la ejecución de desagües a cielo abierto, la limpieza de los canales existentes, la colocación de bombas extractoras de agua y la realización de trabajos que contribuyan a minimizar las consecuencias por lluvias. Aseguran que contra las napas altas no se puede hacer nada, “es propio de la naturaleza”, pero que como medidas paliativas “podrían hacerse un montón de cosas que no se están haciendo”.
“Hay países que sufren huracanes, terremotos, erupciones de volcanes o tornados y que sin embargo, aún con lo terrible que pueden ser esos fenómenos, están preparados para enfrentarlos. Se sabe que Santa Fe es una palangana y que con la altura que tiene el río es imposible que drene el agua pluvial. ¿Cómo no van a estar las bombas extractoras? Una tormenta se puede armar de un momento a otro. No avisa qué cantidad de agua va a caer, por cuánto tiempo... No admito que no haya previsiones; de estar las bombas los efectos de una lluvia serían menores. El tiempo que se pierde en ir a buscarlas puede llegar a ser crucial para nosotros”, dijo Marita, otra vecina.
Más reclamos
Los lugareños aprovecharon la visita de El Litoral para pedir soluciones a varios problemas. Entre ellos, el pésimo estado de las calles, la altura de los yuyos en terrenos municipales y privados y la inseguridad. A la empresa Aguas Santafesinas le solicitaron acceder a la red cloacal.
“En La Guardia Centro las calles son un desastre. Hay algunas que se están borrando y a la delegación municipal no le interesa: cuando vas a pedir tierra para mejorarlas o porque querés tapar un pozo, arreglos que deberían hacer los empleados, no te la dan porque dicen que no vale la pena ya que las napas están altas y no va a durar”, contó Sergio. Y agregó: “Por la calle principal del barrio pasan por día alrededor de 25 camiones de una empresa hormigonera, así que imaginate cómo está en todo su recorrido”.
Alberto Gauna remarcó la necesidad que tienen los vecinos de acceder al servicio de cloaca, sobre todo teniendo en cuenta que la cañería máxima que conduce los líquidos al Colastiné pasa por el barrio. “Los caños de la cloaca máxima están debajo de esta calle. Qué les cuesta incluirnos en el tendido. Por estos días, todos los pozos negros están saturados y cada dos semanas hay que llamar a las poceras, que cobran entre $ 180 y $ 200 para desagotarlos”, señaló.
Por último, el hombre indicó que en La Guardia no se realizan mejoras hace años, pese a que el barrio tiene 192 años de existencia. “¿Mejora?, ¿qué es eso? Acá ésa es una palabra desconocida. Asimismo, nuestro barrio es muy promocionado por el taller de artesanías. A quienes vengan los invito a que avancen 300 metros y vean cuál es nuestra realidad”, finalizó.