Qué hacer cuando los sofocos nos sofocan
Los calores o sofocos son el síntoma más común en la menopausia. Afecta a entre el 60 y el 80% de los mujeres. Tratamientos hormonales, tibolona y fitoterapia son algunos de los abordajes existentes.
textos. DR. ALEJANDRO HAKIM (*). FOTO. EL LITORAL.
En la Argentina, la menopausia se produce alrededor de los 52 años, en promedio. Por el aumento de la expectativa de vida de la población, es esperable que la mujer viva cerca de un 30% de su vida luego de la menopausia, por lo cual es de suma importancia aprender los cuidados y prevenir trastornos de esta etapa.
La consulta médica es fundamental para restablecer una buena calidad de vida, ya que los síntomas del climaterio generan muchas veces esa pérdida sin necesidad, al contar con tratamientos para prevenir y aliviar los síntomas y disfrutar de esta etapa con plenitud.
Los sofocos son el síntoma climatérico más común: afectan a entre el 60% y el 80% de las mujeres, sobre todo en los dos primeros años de la menopausia, persistiendo en un 25% a los 5 años y en un 10% a 20% a los 10 años.
Varían notablemente en intensidad y frecuencia de una mujer a otra, pueden venir acompañados por transpiración, palpitaciones, aprehensión y ansiedad, contribuyen al disconfort y al distress, particularmente cuando contribuyen a los disturbios del sueño. Por este motivo siguen siendo un gran problema.
Si bien en la actualidad el origen de los sofocos aún no ha sido aclarado completamente, los estudios sugieren una gran variedad de mediadores potenciales. Actualmente, se busca resolver esta problemática a través de la indicación de un tratamiento hormonal o no hormonal, dependiendo de cada caso en particular.
TERAPIAS PROPUESTAS
La terapia hormonal (TH) de estrógenos, con o sin gestágenos, resulta muy eficaz para el control de este síntoma tan molesto tanto en la reducción de la frecuencia, como en la intensidad de los mismos.
Otra posibilidad es indicar tibolona, un esteroide sintético con débil actividad estrogénica, gestagénica y androgénica, que ha demostrado ser tan eficaz como la TH. Ambos son los tratamientos de elección cuando no existen contraindicaciones. Las dosis, el régimen y la vía de administración de la TH o de tibolona deben ser individualizados para cada paciente.
Dentro de las terapias alternativas existen los fitoestrógenos, moléculas de origen vegetal con débil actividad estrogénica, que demostraron en ensayos clínicos una pequeña reducción en la frecuencia e intensidad de los sofocos.
Por otra parte, la homeopatía, las terapias magnéticas, la reflexología, dong quai (hierba empleada en fitoterapia), gin seng (planta medicinal) y la vitamina E, entre otras alternativas, no han demostrado una efectividad clínica significativa.
Cabe agregar que se trata de un tema que requiere de nuevos estudios para investigar los mecanismos de los sofocos, de modo de encontrar novedosos modos de abordar terapias en esta área. El tema fue presentado por la Dra. Blanca Campostrini en el 2º Congreso Internacional de Controversias en Obstetricia y Ginecología, que se realizó en Buenos Aires desde el último miércoles hasta ayer.
(*) Presidente de la Asociación Argentina de Controversias en Obstetricia y Ginecología.
La menopausia es un cambio normal en la vida de una mujer, cuando cesan sus períodos menstruales. Es por eso que algunas personas se refieren a la menopausia como “el cambio de vida”.
Durante la menopausia, el organismo de una mujer comienza lentamente a producir una menor cantidad de las hormonas estrógeno y progesterona. Esto sucede a menudo entre los 45 y 55 años. Se considera que una mujer ha entrado a la menopausia cuando no ha tenido un período por 12 meses seguidos, y no existen otras causas para este cambio.
Al acercarse a la menopausia puede tener síntomas de los cambios por los que está pasando su organismo. Muchas mujeres se preguntan si estos cambios son normales y muchas están confundidas acerca de cómo tratar sus síntomas.
Pueden sentirse mejor si aprenden todo lo posible sobre la menopausia, y si consultan a su médico acerca de su salud y sus síntomas. Si desea tratar sus síntomas, él o ella pueden enseñarle más acerca de sus opciones y pueden ayudarla a tomar las mejores decisiones sobre su tratamiento.