El “Kitu” es el hombre clave para hacer jugar al equipo. Así lo siente y no le pesa la responsabilidad, sino que cree que está en su mejor forma.

El “Kitu” va al frente. Y no se esconde, sino que pone y corre. Sabe que es el creador y para eso tiene que pedirla y hacerse el dueño de la pelota. Pero también ayuda con sacrificio en la recuperación. Foto: agencia télam

Alberto Sánchez

(Enviado especial a Rosario)

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Ayer por la tarde, en el último partido preparatorio con vistas al inicio del Torneo Clausura de Primera División, Colón derrotó a Newell’s en el Coloso del Parque Independencia por 2 a 1. A los 17 minutos, el local se puso en ventaja mediante el tanto del “Pulga” Luis Rodríguez, pero cumplida la media hora apareció Esteban Fuertes: el eterno goleador sabalero aprovechó una excelente asistencia de Iván Moreno y Fabianesi y batió a Peratta con un tiro rasante al caño derecho.

Cuando restaba sólo un minuto para la culminación de la primera etapa, una buena jugada del “Bichi” recostado sobre la izquierda derivó, luego de un rebote, en los pies de Juan Quiroga, que envió el centro al segundo palo, y Germán Cano, ganándole la posición a su marcador, superó a Peratta con un cabezazo de pique al suelo.

En el complemento no hubo nada para destacar, por lo menos frente a los arcos, aunque vale rescatar el buen funcionamiento colectivo, sobre todo defensivo, que tuvo el elenco de Fernando Gamboa a la hora de manejar el partido, aun sin tener tanta tenencia de balón, algo que el técnico colonista siempre pregona, por lo que podría ser uno de los ítems a corregir, pero eso seguramente se verá en la competencia misma, esto es, ante Quilmes, el sábado a las 21.15.

El “chofer” Díaz

Luego del cotejo, Damián Díaz charló con los medios santafesinos, evidenciando un lógico conformismo: “Estoy muy contento con lo que hizo Colón, no sólo por lo de hoy (por ayer). La evolución se nota a medida que van pasando los días, porque sin desmerecer, entre este equipo de Newell’s y el que presentó el otro día Rafaela, la diferencia es muy notoria. Demostramos que estamos a la altura de las circunstancias y al mismo nivel que cualquiera”.

El hombre nacido en Central hizo un particular análisis comparativo entre este Colón y el Colón de algunos partidos del Apertura: “Cuando ellos se pusieron arriba en el resultado, no nos desesperamos, como quizás pasó el año pasado, cuando nos hacían un gol y nos convertíamos en un equipo muy largo, con muchas individualidades, corriendo uno para un lado y otro para otro. Esta vez eso no se vio, tratamos de mantener la tranquilidad, sabiendo que todavía faltaba mucho, y por suerte lo dimos vuelta rápidamente”.

También explicó la razón de las dos primeras derrotas en Mar del Plata: “Contra Aldosivi y Olimpo, sin querer poner una excusa, no era nuestra idea ganarles, sabíamos que estábamos haciendo un trabajo físico especial, aumentando las cargas, y la verdad es que nadie quería arriesgar las piernas, nadie quería correr ni un metro de más, porque veníamos con arrastre de arena y pesas importante, y si hacés un sobreesfuerzo, por ahí te podés lesionar. Contra Aldosivi y Olimpo pasó eso, algo muy distinto a lo que jugamos contra Newell’s”.

“Siempre me esforcé”

“Ganamos porque fuimos superiores a Newell’s en todos los aspectos. Olimpo y Aldosivi nos manejaron la pelota, estábamos muy imprecisos, nos sentíamos muy duros, mientras que los dos equipos estaban muy rápidos. Eso me asustó un poquito, yo me sentía muy duro, pero a medida que pasaron los días nos fuimos sintiendo más cómodos, más ligeros”, agregó el “Kitu”.

Ante la consulta sobre si a su natural trabajo de generar juego le está agregando algo más de sacrificio, Díaz respondió: “Uno siempre tiene cosas para mejorar. Igualmente, no coincido con que ahora me esfuerzo más, antes también lo hacía, puede ser que a veces se note y otras no, pero yo siempre me sacrifico por el equipo, hasta la gente me lo reconoce y estoy muy tranquilo por eso. En la parte futbolística por ahí podés jugar bien o mal, a lo mejor no te sale una bien, pero hay que estar tranquilo, jugando seriamente, sabiendo que mis compañeros confían en mí, para cuando tenga la pelota, tratar de no perderla”.

Ganando minutos de juego. Sebastián Prediger aprovechó a pleno la pretemporada para ponerse a punto y pelear por ser titular en el mediocampo sabalero.

foto: agencia télam

Avanzando en lo táctico, el enganche rojinegro manifestó: “Nosotros siempre vamos a ir a buscar los partidos, en cualquier cancha y contra cualquier rival. Estoy muy confiado por los jugadores que llegaron, aunque obviamente que no vamos a salir a poner la cabeza y atacar con seis o siete jugadores, desprotegiéndonos atrás, eso no”.

Por último, Damián Díaz dejó una reflexión para pensar: “En un año llegaron ocho o nueve jugadores y no es fácil armar un equipo. Vélez o Estudiantes hace tres años que vienen jugando juntos. Nosotros estamos trabajando para ser un equipo corto e inteligente, sabiendo cuándo tenemos que presionar y cuándo no. Pienso que estamos captando el mensaje de Gamboa, y ojalá lo podamos hacer el sábado, eso sería fundamental”.