En Tribunales

Declararon las víctimas del abogado acusado por estafa

La semana que viene se realizará la audiencia de constitución de querellante, a pedido del abogado Jorge Pedraza, como patrocinante de los damnificados.

De la Redacción de El Litoral

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El juez de Instrucción Segunda, Nicolás Falkenberg, le tomó declaración testimonial al matrimonio que acusó por estafa a un abogado del foro local. Este miércoles el magistrado escuchó a la pareja de damnificados que, por separado, ratificaron el relato que consta en la denuncia penal y contestaron preguntas ante la presencia de su abogado defensor, el Dr. Jorge Pedraza; la Fiscal Nº 5, Elena Perticará; y el abogado Leandro Corti que representa al imputado Jorge F. Maldonado.

Primero escucharon a la mujer, una abogada de 36 años que contó de qué manera ella y su esposo fueron despojados de $ 240.000 que pretendían cambiar por U$S 50.000, según el acuerdo que habían alcanzado con el abogado al que ahora le imputan el delito de estafa.

Además de contar las circunstancias en las que se dieron los hechos, la mujer se refirió a la reunión mantenida los días posteriores con familiares del acusado, para tratar de saldar la deuda y resolver el problema. Según su relato allí se enteraron de que no eran los únicos que cayeron en la trampa, sino que otras personas ya habían hecho expresos sus reclamos, y que así lo demuestra una pintada sobre el frente de la casa en la que con aerosol escribieron la palabra “ladrones” o “chorros”.

También dijo que en ese encuentro los familiares reconocieron ser víctimas del joven letrado, ya que previamente había desafectado una casa como bien de familia y ahora se encuentra embargada e hipotecada.

Casa propia

En ese momento el abogado Corti quiso saber si la plata que denuncian -$ 240.000- era de ellos o como refieren en uno de los mensajes de texto que intercambiaron el día de la negociación, pertenecía además a “proveedores” del marido que está al frente de una casa de venta de artículos de informática.

La insistencia del abogado para saber el origen de los fondos -preguntó en qué bancos y cuentas estaba depositada- generó la reacción de la Fiscal Perticará, que se opuso a la pregunta a la que consideró “irrelevante para la investigación”. No obstante el juez Falkenberg aceptó que la víctima dijera dónde guardaban el dinero.

En ese momento la audiencia debió suspenderse ya que la víctima tuvo una crisis de nervios, y una vez repuesta aclaró sobre el origen de “los $ 240.000 que hoy nos faltan”. La mujer dijo que vive de la profesión y que su marido ejerce el comercio, que tienen tres hijos chicos y que viven en una casa prestada; “justamente estábamos juntando el dinero para hacernos nuestra casa”, le espetó.

“Agua fría”

Una hora más tarde se presentó el marido, de 37 años, que habló de las referencias que tanto él como su esposa tenían del abogado.

Si bien no lo conocía personalmente las referencias que le dio su esposa eran muy buenas. “Era un chico muy serio, estudioso, no asistía a boliches o ese tipo de reuniones”, reconoció.

También dijo que “para nosotros fue como un balde de agua fría” el momento en que se encontraron sin el dinero y con un pagaré por el mismo valor y los papeles de la casa que había dejado el acusado sobre la mesa. El caso se remonta al último viernes previo a la Feria Judicial de Invierno, cuando el abogado Pedraza presentó la denuncia en la fiscalía de la Dra. Perticará, por un hecho ocurrido el 6 de julio pasado.

Indagado

Ese día, Maldonado recibió al matrimonio en su casa paterna del barrio Sur, donde supuestamente se iba a realizar una operación cambiaria. El matrimonio llevó los $ 240.000 pero con la excusa de que los tenía que contar, los llevó a un cuarto contiguo, luego los sacó de la casa y finalmente se fue diciendo que había surgido una complicación y que tenía que ir a buscar a su hija al jardín.

Sin tiempo a nada el matrimonio se quedó en la casa de Maldonado sin saber qué hacer, con un pagaré por el dinero entregado y los papeles de la casa que a la postre se supo que se encontraba hipotecada y embargada. El 1º de agosto el juez Falkenberg indagó a Maldonado por el supuesto delito de estafa. En esa ocasión el imputado negó el delito que se le atribuye y reconoció su adicción al juego, que es lo que lo llevó a tomar el dinero ajeno.