Patinando por la ruta

Guillermo Brocal en la ruta a Buenos Aires

Guillermo Brocal cuenta un hecho inédito e irrepetible: en 1952 unió Santa Fe con Buenos Aires en patines. El raid demandó algo más de 52 horas. Aquí, el recuerdo a 60 años de una enorme hazaña.

TEXTO. ENRIQUE CRUZ (H). FOTOS. FLAVIO RAINA Y GENTILEZA GUILLERMO BROCAL.

La llegada de Brocal al club Escalante, luego de uno de los raids desde San Justo. Una multitud lo estaba esperando.

Brocal hoy, exhibiendo los patines de la hazaña de hace 60 años.

Han pasado 60 años de un hecho que, en aquel entonces, causó conmoción. Guillermo Brocal era un joven entusiasta que se dedicaba al patín. Desde niño y junto a su hermano José Agustín lo practicaban y decidieron, allá por 1942, llevarlo al nivel deportivo participando en torneos de velocidad o resistencia en Rosario y Buenos Aires.

En 1944 fundaron el “Santa Fe Patín Club”, primera institución de nuestro medio, afiliada a la Federación Santafesina con asiento en Rosario. Además de los hermanos Brocal, estaban Ricardo Gayá, Alfredo González y Romeo y Juan Gilardi formando parte de aquella comisión directiva.

Si bien estos deportistas se destacaron en todas las disciplinas del patín, las que tuvieron mayor envergadura y cobraron notoriedad fueron los raids. El primero fue en 1945, uniendo Santa Fe con Esperanza, con punto de llegada en Unión, donde los hermanos Brocal se habían asentado por entonces durante las presidencias de Francisco Anello y Esteban Yebra.

El director de aquel raid fue, ni más ni menos, que don Pedro Candioti y colaboraron los profesores de educación física José Tomás Guala y Laveggio. Unos años después, en 1952, el grupo de patinadores se vuelca al club del Personal de Correos y Telecomunicaciones, realizando exhibiciones acrobáticas y artísticas. Ese mismo año, se produce la concreción de un sueño largamente anhelado.

TRAS LOS OBSTÁCULOS, LA EMOCIÓN

Representando al club Correos, José Agustín Brocal, Guillermo Brocal y Jorge Bontaín, en esforzado raid, unen en 52 horas y media las ciudades de Santa Fe y Buenos Aires, con punto de partida en la esquina de Moreno y 25 de Mayo, de nuestra ciudad. Casi un año de entrenamientos, preparativos, cálculos, etcétera, le dieron el bien ganado título de campeones argentinos de tiempo y distancia sobre patines. Partieron a las 8 de la mañana de un 12 de setiembre, hace 60 años, y llegaron el 14, fecha en la que se celebraba el “Día del cartero”.

“Hasta Rosario encontramos un asfalto espléndido”, recuerda Guillermo. “El tiempo que empleamos para recorrer los 164 kilómetros entre nuestra ciudad y Rosario, fue de menos de diez horas, todo un récord”, señala.

La salida desde Rosario se produjo a la noche. Hubo deportistas rosarinos que los acompañaron en bicicleta y motos hasta dos o tres pueblos, pasada la ciudad. “Los reflectores de los vehículos que nos acompañaban desde atrás, iluminaban el camino”, dice Brocal. Pero cuando amaneció el día siguiente (sábado), el camino empezó a ser más dificultoso por las malas condiciones. “Había que caminar con los patines, y los sucesivos golpes nos hacían detener. Lo más doloroso eran las uñas de los pies, que por las vibraciones se ponían moradas”, cuenta Brocal.

El camino en San Nicolás, Pergamino, Arrecifes y Capitán Sarmiento fue cubierto en esas condiciones. El domingo a la mañana (tercer día), cruzando la localidad de Pilar, el estado de la ruta fue mejorando. “La entrada a la zona suburbana de Buenos Aires se hizo a las 9, pero al club Comunicaciones llegamos a las 12. Allí, emocionados hasta las lágrimas, fuimos recibidos por las autoridades del club y por el público porteño. La Federación Argentina de Patín nos declaró huéspedes de honor”, concluyó.

Más tarde, en marzo de 1954, José Brocal se consagró campeón provincial de velocidad sobre patines en 200 metros y la posta logró el vicecampeonato con los dos Brocal, Rodolfo Molina y Bontaín.

Pródigo en resultados deportivos, nuestros patinadores realizan en el llamado Pabellón Deportivo de la Ferial Rural las 100 horas a la americana sobre patines, prueba fiscalizada por la Federación Santafesina. Dieron 17.245 vueltas al circuito, recorrieron un total de 1.795 kilómetros y la prueba fue transmitida por LT 9.

EN EL EQUIPO DE HOCKEY

Luego, el grueso de los patinadores pasó a militar en Colón y se destacaron aquellos equipos de hockey. Uno de ellos estaba integrado por Emilio Mendoza, Héctor Soberano, Miguel Gutiérrez, Carlos Marchiori, Garry Noceda, Guillermo Brocal y José Brocal.

Otro equipo tenía a Armando Brizuela, Rodolfo Molina, Jorge Bontaín, Mario D’Amato, Juan José Venetz, Miguel Angel Soutullo y Héctor Sabater.

Como suplentes se desempeñaban Luis Gervasoni, Raúl Yamashiro y Carlos Lares, siendo delegados Felipe Vitacolona y Regino Grioni. Por su parte, Julián Zárate era el único referí que se contaba por su conocimiento del reglamento internacional.

Luego, Brocal realizó otros raids, como -por ejemplo- el de unir Santa Fe con Esperanza y el de Santa Fe con San Justo, ya cuando Guillermo Brocal representaba a Wenceslao Escalante.

Pasaron 60 años, pero el recuerdo sigue vigente para este verdadero monstruo del deporte santafesino.

Brocal inicia su trayecto desde San Justo, acompañado por muchísimos sanjustinos y santafesinos.

El equipo de hockey de Colón de la década del ‘50 en un partido ante Tucán en la cancha de Estudiantes de Paraná. Vitacolona, Emilio Mendoza, Soberano, Gutiérrez, Marchioni, Grioni, Noceda y los dos Brocal.

En 1956, antes de un partido entre Colón y Atlanta, Brocal llega desde Esperanza con el banderín de la Liga de esa ciudad por pedido de don Francisco Ghiano. Meses después, por pedido del doctor Brunás, se llevó una placa de bronce que aún está en la Municipalidad de esa ciudad.