artes visuales
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“Dibujos”
En el Bar La Fávrika, de izquierda a derecha: Hover Madrid y Rodolfo Elizalde (de pie); Clelia Barroso, Emilio Ghilioni, Rubén Echagüe y Rosa María Ravera (sentados). Foto: Marcelo Yuvone
Tapa de la publicación.
Foto: Gentileza producción
Domingo Sahda
Con el título aludido ha hecho su aparición pública en nuestro medio un impreso que enlaza por sí mismo dada su modalidad de presentación las características de libro-catálogo cuya calidad de edición se destaca por su excelencia visual y contextual. En el mismo aparecen reunidos una colección de dibujos impresos, no como viñetas sino en tamaño medio-mayor que pertenecen al grupo de artistas visuales rosarinos integrado por Clelia Barroso, Rubén Echagüe, Rodolfo Elizalde, Emilio Ghilioni y Hover Madrid. El texto teórico-crítico que acompaña a la publicación está firmado por Rosa María Ravera.
La colección citada ofrece, a modo de documentación artística, información de primer nivel en torno a la calidad creativa de un grupo de artistas de reconocida trayectoria en el horizonte cultural de la región.
Es de suyo conocido que el Dibujo, instancia distintiva de la inteligencia humana cuyos orígenes se pierden en la noche de los tiempos, ha señalizado con distintas ópticas, sean éstas de índole religiosa o profana, el devenir del hombre aportando datos inteligibles, sensibles y proyectivos en la aventura de vivir propia de la especie. Cuando hablamos de Dibujo, precisamente con mayúsculas, nos estamos refiriendo al denodado impulso creativo que se asienta en el espacio plano, sea éste liso o rugoso; haciendo de la línea y su trayecto su itinerario claro y tajante o su ambular sinuoso el sentido distintivo de este quehacer creativo. Precisamente en esta claridad expresiva se puede calibrar el Dibujo en tanto lenguaje expresivo que interpela, que vincula, que denuncia, diferenciado del mendaz borroneo presuntivamente expresivo y temperamental “a la moda del mercadeo”. Estas presuntuosas chapucerías nunca alcanzan la excelsa calidad del Dibujo planteado como lenguaje mayor, precisamente ese del que se da cuenta en este impreso cuya calidad de información se sostiene de cabo a rabo.
Enhorabuena por el producto hecho público. No es una colección de originales, frente a los cuales se produce la experiencia estética de conmoción intransferible. Se trata de un conjunto de alta calidad informativa que da cuenta del producto creado por un conjunto de artistas de sólida trayectoria, quienes participan con su quehacer intransferible en la construcción de la memoria de la cultura de la región.
El conjunto de dibujantes está nucleado en el punto de arranque que valida esta acción, que en ningún momento resbala hacia la trivialidad. Se sostienen por su calidad intrínseca, demostrando que quien es capaz de creer en su vocación es capaz de crear obras de relevancia.
El meduloso trabajo de Ravera, quien avala desde el lenguaje de la palabra el lenguaje de la imagen, redondea este excelente producto que debiera estar presente no sólo como documento sino como referencia capaz de atravesar el tiempo y el espacio, instando a reiterar experiencias de este tipo, ennoblecedoras para sus partícipes directos y por refracción a la comunidad a la que pertenecen.