Racing perdió ante Quilmes y perjudicó a Independiente

Salió el partido del que todos hablaron

Redacción de El Litoral

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Télam

Racing Club cayó anoche por 1-0 ante Quilmes, como visitante, en un partido rodeado por sospechas debido a que la caída del equipo de Avellaneda complicó a Independiente, su clásico rival, en la pugna por no perder la categoría, en el inicio de la 16ta. fecha del Torneo Final. El único gol del partido jugado en el estadio del Cervecero lo convirtió el delantero Martín Cauteruccio, a los 9 minutos del primer tiempo.

Con este resultado, Quilmes (1.228) no podrá ser superado en los promedios en dos fechas por Independiente (1.154), aunque el Rojo saque los tres puntos mañana ante Estudiantes y en su próximo partido con River Plate, en el Monumental. Además, el equipo Cervecero pasó en la tabla por el descenso a Argentinos Juniors, que quedó con un coeficiente 1.181 y que en esta fecha recibirá a River el domingo en el estadio Diego Maradona de La Paternal.

En el certamen, Quilmes sumó 24 puntos, a ocho del líder Newell’s (visita a All Boys el lunes), mientras que Racing quedó con 20 y no pudo garantizarse la clasificación para la Copa Sudamericana.

Desde el comienzo, Quilmes asumió el control de las acciones y se puso rápidamente en ventaja con una asistencia de Fernando Elizari al centro del ataque para Cauteruccio, quien ante la pasividad de la zaga racinguista, definió con un fuerte disparo al palo derecho de Sebastián Saja. En ese momento, ambas hinchadas empezaron a cantar: “El que no salta se va a la B”, en clara alusión a Independiente, que lucha con Argentinos, el cervecero y San Martín de San Juan por no perder la categoría.

Con el resultado en contra, el visitante, que arrancó sin delanteros netos en su equipo titular (entró sólo Javier Cámpora a los 20 minutos del segundo tiempo), no tuvo reacción para atacar y durante toda la primera etapa no generó ninguna situación de riesgo en el arco defendido por Emanuel Trípodi.

En la comodidad del desarrollo, Quilmes tampoco fue profundo y se notó su nerviosismo por estar jugando una instancia decisiva en su puja por mantener la categoría. Sólo sobre el final estuvo Elizari de cara al gol, pero se enredó con la pelota frente a Saja.

En el período final de este cotejo, que no tuvo jugadores amonestados por el árbitro Saúl Laverni, el desarrollo fue similar y el local casi convierte el segundo tanto con la misma fórmula del primero: asistencia de Elizari para Cauteruccio, quien metió un zurdazo que pasó cerca del palo derecho del arquero rival. Sin embargo, fue un espejismo porque el conjunto dirigido por Luis Zubeldía no generó más situaciones y su rival, muy impreciso, sólo dejó que se diluyeran los minutos para terminar acreditándose los tres puntos fundamentales.

Graves incidentes en Mendoza

Diego Caballero, delantero de Independiente Rivadavia, y Eduardo Carbini, vicepresidente del club, fueron agredidos ayer por un centenar de barrabravas, la mayoría encapuchados, durante la práctica que se realizaba en el estadio del club mendocino, lo que derivó en la suspensión del partido de mañana ante Atlético Tucumán.

“No hubo un muerto de milagro, se pareció a una guerra” dijo Caballero, quien fue agredido por un arma blanca. El futbolista, en charla con TyC Sports, agregó que fue “de terror lo que vivimos, lamentablemente hoy nos tocó a nosotros, antes pasó con los muchachos de Crucero del Norte. Gracias a Dios estamos bien y la podemos contar. Tengo una herida abajo de la rodilla derecha con un arma blanca, me dieron seis puntos”.

Independiente Rivadavia pelea por evitar el descenso en el torneo de la Primera B Nacional y la práctica se realizaba en el estadio Bautista Gargantini del Parque General San Martín. “Cuando eran cerca de las cuatro de la tarde y estábamos haciendo la práctica de fútbol, pensando en el partido del domingo, escuchamos ruidos en el portón principal. Vimos que entraron a romper todos los autos y tirando bombas molotov, y después nos agredieron”, agregó.

El partido fue finalmente postergado por la AFA para el miércoles venidero, a las 15, en el mismo escenario pero sin público.

Caballero afirmó, además, que antes del hechos varios jugadores “estaban recibiendo mensajes de texto a los celulares con amenazas” y que evalúa la posibilidad de “dejar al club”. “De esto no me olvido más, al fin y al cabo es un deporte. La policía llegó después de que pasó todo. Antes hubo insultos, cosas más normales, pero nunca una agresión así. Parecía que éramos sus enemigos, una locura”, finalizó Caballero.

La brutal agresión motivó que el presidente de Independiente Rivadavia, el empresario periodístico Daniel Vila, anunciara que “cuando terminen los partidos que restan me voy del club”.