la historia del ferrocarril en santa fe

El área oculta de Santa Fe Cambios (II)

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Aserradero y carpintería en la zona de Santa Fe Cambios (1932, circa).

Foto: Museo Ferroviario Regional de Santa Fe

 

Andres Andreis (*)


Fue lugar oculto, testigo más que centenario de alistamientos de locomotoras desde su gran depósito en Salvador del Carril, el desmembramiento y armado de nuevos trenes de carga, la reparación de vagones y fabricación de repuestos. Nos sigue sorprendiendo y revelando otros hitos de su dilatado historial, convertido hoy en Parque Federal.

Dándole continuidad a la primera nota, que fue publicada el pasado 23 de mayo en esta misma columna, considerando de importancia para el conocimiento ciudadano y, en función didáctica para alumnos y estudiantes de todos los niveles, extraigo a continuación algunos capítulos de mi libro, “El ferrocarril. Lo que el tiempo no borró”, editado en 2003 por la UNL, y relacionados con Santa Fe Cambios.

La Estación Santa Fe Cambios, construida en la primera década del siglo XX, centro operacional de la playa de maniobras del mismo nombre, estaba edificada en madera de pinotea francesa machimbrada. Se hallaba ubicada en el centro de la playa, entre las calles Quintana y Padilla, donde aún quedan algunos vestigios y tipas que la rodeaban. Detrás de su frente se encontraba la vía balanza que conducía a los vehículos a la báscula pesadora de vagones. En este amplio perímetro de vías que sumaban 51-según último registro-, se armaban y desarmaban trenes para distintos destinos. La empresa Ferrocarriles Argentinos con modificaciones técnico-operativas hacia los años de 1970, dispuso que fuera la única playa ferroviaria de maniobras dentro de la ciudad. Pero a partir de 1990, contradiciendo estos objetivos, el gobierno menemista la deja de operar, abandonando sus instalaciones, quedando solamente los vagones obsoletos, produciéndose paralelamente un asiento poblacional de indigentes. El 12 de julio de 1996, manos anónimas incendian y destruyen esta vieja estación, desapareciendo de esta forma otro símbolo histórico del ferrocarril que hasta 1947 pertenecía a la Compañía del Ferrocarril Santa Fe.

Usina del Ferrocarril Santa Fe: La Compañía Francesa del Ferrocarril Santa Fe había crecido de tal forma hacia mediados de la primera década del siglo XX, que se fue extendiendo a su ámbito industrial, especialmente sus talleres, depósitos y playas de maniobras. En poco menos de dos años, fue montada y equipada su propia usina, que en la parte superior de su chimenea lleva inscripto el año de su construcción (1918) y hoy permanece imborrable. Está ubicada a la altura de calle Iturraspe entre Pedro Víttori y San Luis. En 1943 la Compañía prescindió de su servicio, siendo luego alquilada a un grupo de ingenieros químicos que a través de su caldera realizaban experimentos para obtener acetona de maíz. Hoy tiene uso municipal para la sección de Ornamentación y Festejos.

Caballerizas: La Empresa poseía sus propias caballerizas. En la playa de maniobras a la altura de Luciano Torrent, una de ellas estaba instalada a principios del pasado siglo. Como toda caballeriza, estaba conformada por un tinglado con techo a dos aguas donde se hallaban los comederos y sitios para abrevar. Los yeguarizos de tiro fueron utilizados para el traslado de todo tipo de material hacia sectores cercanos operativos. También era común ver el desplazamiento de los técnicos e ingenieros en sulky para medir la topografía del terreno y la inspección de obras.

Herrería: Un sector cercano a las caballerizas, estaba destinado a la sección Herrería, cuyas estructuras de chapas aún se hallan en pie. En este taller, que hacia 1960 pasó a denominarse Centro de Recuperación de Vehículos, se reacondicionaban los bastidores de los vagones de carga, se recuperaban zapatas de frenos, frenos hidráulicos, espigas de paragolpe, palancas, etc. Años después todo el trabajo se concentró en Laguna Paiva.

Aserradero y Carpintería: Los grandes talleres ferroviarios tenían tareas de relevancia, como lo fueron en su tiempo los Talleres Santa Fe, los de Laguna Paiva y San Cristóbal, entre otros. Pero fuera de esos ámbitos existían talleres auxiliares, que como los de Vía y Obras o los de Tracción, tenían los requerimientos que completaban la compleja estructura de una empresa ferroviaria. En el caso de los aserraderos y carpinterías, las labores eran diversas. Estaban linderos a los de herrería y recibían los rollizos de quebracho colorado, que convenientemente cortados y calados se convertían en durmientes. Instalados allá por 1905 se fabricaban las bases de puentes, se cortaban tirantes a medida para montar tinglados, como así tablones y tablas para revestimiento de vagones, entablados y entarugados de pisos. Al igual que el sector herrería, se concentró todo en Laguna Paiva.

Bodega: En esta cadena que formaba el área operativa de Santa Fe Cambios, se hallaba la sección Bodega. Construida también en la primera década de 1900, de material con techo de tejas francesas y galería con cenefas, se mantiene en la actualidad, pero con signos de evidente deterioro. En ella se depositaba material ferroviario de todo tipo, especialmente piezas de mesas giratorias, repuestos de básculas y herramientas en general.

Material Rodante: La sucesión de galpones de material que vemos desde la avenida Pedro Víttori, entre Pedro Zenteno, Córdoba e Iturraspe, con techos en “diente de sierra”, pertenecieron a la sección denominada Material Rodante. Unidos a ellos, sobre el frente que da a Pedro Víttori, se encontraba un extenso galpón de chapa donde se colocaban los vagones a reparar, especialmente sus bogies, bastidores y ejes Hoy sólo han quedado las cabreadas sobre el sendero de la ciclovía. Con el tiempo este sector fue perdiendo relevancia, siendo absorbido y trasladado todo su material y equipos también a Laguna Paiva. En la actualidad estas construcciones están ocupadas por el Kennel Club, Camco, Centro de ex combatientes de Malvinas y taller de UPCN.

Antes de finalizar y por razones de espacio, hago mención al Laboratorio de Análisis Químico al lado este de La Redonda. En él se controlaba el agua en las locomotoras a vapor y luego, con las diesel eléctricas se realizaban análisis de combustible y lubricantes. En general estos fueron los asentamientos industriales más importantes de Santa Fe Cambios. Hay otros, pero quedarán para una nueva investigación en este redescubierto y apasionante lugar de la historia ferroviaria santafesina.

(*) Secretario de Prensa del Museo Ferroviario Regional de Santa Fe.

El 12 de julio de 1996, manos anónimas incendian y destruyen esta vieja estación. Desaparece así otro símbolo histórico del ferrocarril que hasta 1947 pertenecía a la Compañía del Ferrocarril Santa Fe.