Se realizó una gala con fines solidarios

De la redacción de El Litoral

Recientemente la marca de alta joyería Rubí Rubí presentó su colección Luces del Fin del Mundo, acompañando los diseños de alta costura de Gabriel Lage.

El marco fue el imponente Teatro Colón, uno de los edificios más bellos y emblemáticos de la Argentina,; que por primera vez abrió sus puertas para un evento de estas características.

Con más de 40 modelos sobre pasarelas, la magnífica colección de Rubí Rubí -inspirada en los hielos continentales- acompañó con sus formas caprichosas y destellos de diamantes y zafiros, la colección de exclusivos vestidos de noche y novias que replicaban las formas y las siluetas de las joyas.

A beneficio

Cabe destacar que el evento fue a total beneficio del Hospital de Clínicas, y tuvo en su front row celebridades de la talla de Susana Giménez y Mirtha Legrand, entre otras, y representantes de la sociedad porteña como Mónica Parisier, Rossella della Giovampaola, Ana Rusconi y Marina Dodero. Una alquimia que fusionó la moda con la alta joyería como perfectos exponentes del diseño de autor.

La presidenta de la entidad benéfica, Mercedes von Dietrichstein de Zemborain, agradeció con emotivas palabras la colaboración recibida, debido a que gracias a este evento se logró el objetivo para la refacción del área de terapia intensiva pediátrica del Hospital de Clínicas. “Nada de esto hubiera sido posible sin el invalorable apoyo de muchos colaboradores y el aporte económico de estas empresas privadas”, sostuvo.

La especial disposición del Salón Dorado permitió que todo el público pudiera apreciar de cerca la imponente colección de Rubí Rubí, la empresa con trayectoria de setenta años de marca y cien años de joyeros. Una vez más, Rubí Rubí cumplió con el fin solidario que la caracteriza.

Características de la colección

La colección de la marca Rubí Rubí -Luces del Fin del Mundo- se inspira en los hielos del sur argentino, el magnífico ámbito donde las luces se despliegan en sus tonalidades más frías, la temática retrata el esplendor inigualable que nos regala la naturaleza, el diseño juega con ilusiones ópticas entre el blanco de los diamantes, el celeste de los zafiros y el marrón de los diamantes chocolate, tricromía que exalta los colores de los hielos, agua y tierra.

Aquí cabe recordar que Rubí Rubí proyecta el diseño de una joya cuidadosamente, logrando poner en ella toda su belleza, coordinando el color y la luz de cada piedra, aportando a cada joya ese glamour de la alta joyería.

Descubrir el camino

Cuando diseñan los sueños y la imaginación se unen y triunfan, parten de una idea y van descubriendo el camino. Sienten la pasión al crear; “el tiempo no existe, crear una joya es mágico, teniendo en cuenta las tendencias de la moda como valor agregado, lo que ha hecho distinguirnos. Las piezas las pensamos para que las luzcan, las codicien y den placer. El desafío es transmitir en ella esa fascinación que a nosotros nos produce porque estamos cumpliendo con los retos de hoy y mañana a través del compromiso asumido”.

De tal modo, Rubí Rubí fue y es un desafío constante en la creación y el diseño, incorporando los colores que dicta la tendencia, pero siempre con la libertad de su caracterizada creación. Nuevas colecciones, únicas y originales en sus materiales y diseños, reflejan un glamoroso estilo. Cada joya es una demostración de una labor realizada con cariño y entrega. Así, ese valor afectivo presupone todo un mensaje de honestidad y ése es el valor que enorgullece a la prestigiosa marca.

Referente

Para esta marca ser orfebres se transforma en algo sublime, trasladando el amor por la creación de una joya de generación en generación, lo que permite ser un referente en la alta joyería. Para esta firma, la joyería es arte, una expresión de sentimientos, crean joyas que llevan la carga del símbolo y la identidad. Para tal fin, cuenta con maestros orfebres estudiosos en la materia, superándose día a día.

Para Rubí Rubí no existen barreras, los límites entre lo sublime y lo banal se mezclan en un complejo juego de formas y colores, en un arte versátil y exquisito. Las de la marca, son joyas que pasarán de generación en generación evocando aquellos momentos únicos vividos, eternizándose en el tiempo.

La producción se realiza teniendo en cuenta el más cuidadoso y detallado estudio de cada una de las piezas, que luego transmiten un look de lujo en el que todo es brillantes, calidad y buen gusto.

La firma propone para sus colecciones las tallas más caprichosas, diamantes blancos, chocolates y negros, engarzados en oro o en platino, que son muy apreciados por su fuego y brillo; el zafiro, el rubí y la esmeralda, por la intensidad y la belleza de sus colores.

Un desafío constante en la creación y el diseño de alta joyería, con largos años de especialización en la fabricación de joyas, pensando cada detalle para que cada una de las piezas tenga su personalidad, su color y su propia luminosidad.

Rubí Rubí -de la mano de expertos orfebres- realiza sus joyas como si se tratara de una obra de arte. Son piezas de alta joyería fabricadas y creadas en sus talleres; joyas únicas y exclusivas como máxima expresión de la maestría joyera de la marca. Con el marco del magnífico Teatro Colón como escenario, la colección Luces del Fin del Mundo pudo ser apreciada por quienes asistieron a una jornada marcada por la solidaridad, otra nota distintiva de esta empresa.

Toda la belleza en el diseño de las joyas de Rubí Rubí y en el de la colección Luces del Fin del Mundo.

Foto: Gentileza producción