Gastón Neffen
Es un cultivo forrajero que se utiliza para alimentar ganado y que emergió entre las plantas ornamentales del paseo.
Gastón Neffen
En medio del cantero de Bulevar Gálvez —al 1600— una solitaria planta de sorgo le saca tres cabezas al resto de las plantas ornamentales que el municipio colocó a finales del año pasado, cuando remodeló la columna transversal de la ciudad.
El sorgo mide casi un metro y con su panoja domina orgulloso y en altura al resto de las plantas del cantero. Una lectora atenta lo vió y le avisó a El Litoral. Al principio, en las primeras etapas de su desarrollo, algunos vecinos pensaron que podría tratarse de maíz o de maicillo, una maleza que suele mezclarse con el pasto y vuelve locos a los puristas del césped.
Pero el ingeniero agrónomo Juan Pablo Ioele, técnico del INTA Corral de Bustos en Córdoba, le confirmó a El Litoral que es sorgo. “Está expresado y abierto porque como no tiene competencia está chocho”, explicó.
¿Cómo llegó al cantero de bulevar? Lo más probable es que a través de las deposiciones de un pájaro, porque es raro que un camión con granos circule por Bulevar Gálvez, pero es solo una hipótesis.
En la redacción del diario, los colegas de Campolitoral —acostumbrados a ver al cultivo en los lotes del centro norte de Santa Fe, cerca de los tambos y potreros ganaderos— lo ven un poco “petiso” al sorgo y especulan que quizás la centenaria arboleda de bulevar le mezquina la radiación solar que la planta necesita para expresar todo su potencial.
Habrá que ver cuánto tiempo más resiste, solo y en fuerte contraste con el resto de la vegetación. Es que cada vez más le cuesta más pasar inadvertido —es como la mosca en el vaso de leche blanca, diría el cliché— y parece difícil que los jardineros del municipio le permitan completar su ciclo.