Redacción de El Litoral
Fue el único hijo nacido del matrimonio de Fidel Castro con Mirtha Díaz-Balart, una joven de la aristocracia cubana con la que se casó en su juventud y antes de comenzar la lucha revolucionaria.
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La Nación
Fidel Castro Díaz-Balart, primogénito del líder cubano Fidel Castro, se suicidó ayer a los 68 años. Desde hace varios meses, Díaz-Balart era atendido por un grupo de médicos con “motivo de un estado depresivo profundo”, señaló una nota oficial de la televisión estatal cubana.
“El doctor en Ciencias Fidel Castro Díaz-Balart, quien venía siendo atendido por un grupo de médicos desde hace varios meses con motivo de un estado depresivo profundo, atentó contra su vida en la mañana de hoy 1º de febrero”, comunicó el diario oficial Granma.
A raíz de su depresión, el hijo de Fidel Castro requirió inicialmente un “régimen de hospitalización y luego se mantuvo con seguimiento ambulatorio durante su reincorporación social”.
Nacido en La Habana el 1º de septiembre de 1949, “Fidelito”, como era llamado popularmente en la isla, fue el único hijo nacido del matrimonio de Fidel Castro con Mirtha Díaz-Balart, una joven de la aristocracia cubana con la que se casó en su juventud y antes de comenzar la lucha revolucionaria que luego lo llevó al poder a él y a su hermano, Raúl.
Estudió Física Nuclear en la antigua Unión Soviética y estuvo al frente del programa nuclear de Cuba desde 1980 hasta 1992, cuando fue destituido por su propio padre por “ineficiencia en el desempeño de sus funciones”.
Castro Díaz-Balart representó a Cuba ante el Organismo Internacional de Energía Atómica (Oiea) y presidió el Grupo de Coordinación de los Países No Alineados para los usos pacíficos de la Energía Atómica.
A su cargo estuvo la inconclusa construcción de la central nuclear de Jaraguá en Cienfuegos, en el centro del país, que con asesoría soviética pudo haber sido la primera instalación de este tipo en Cuba.
Mantuvo su vida familiar en la intimidad, dejándola fuera del foco público. Estuvo casado con la rusa Natasha Smirnova, con la que tuvo tres hijos: Mirta María, Fidel Antonio y José Raúl. Posteriormente se divorció y contrajo un nuevo matrimonio.
Por parte materna, “Fidelito” era familiar de varios congresistas cubano-americanos, como los hermanos Lincoln y Mario Díaz-Balart, quienes desde Miami se han caracterizado por su fuerte discurso anticastrista.
La última vez que se lo vio en público fue en agosto de 2017 en La Habana, durante la investidura como miembro de la Academia de Ciencias de Cuba del premio Nobel de Química Peter Agre.
Al momento de su fallecimiento se desempeñaba como asesor científico del Consejo de Estado y vicepresidente de la Academia de Ciencias de Cuba.
La muerte de Castro se da un año después de la muerte de su padre, quien falleció el 25 de noviembre de 2016 y quien estuvo al mando de Cuba durante más de cuatro décadas.
Raúl con el canciller venezolano
El presidente cubano, Raúl Castro, recibió al canciller venezolano Jorge Arreaza, que realiza una gira por América Latina y el Caribe. que coincide con la iniciada por la región por el secretario de Estado norteamericano, Rex Tillerson.
Raúl Castro le reiteró la “invariable solidaridad de Cuba con la Revolución Bolivariana y el presidente Nicolás Maduro”, según una nota oficial publicada en la web oficialista Cubadebate.
“Si (Donald) Trump nos aplaudiera, estaríamos en el camino de la perdición”, dijo Arreaza sobre el presidente estadounidense durante un acto de solidaridad con el gobierno venezolano que se celebró por la tarde en la Universidad de Ciencias Informáticas de La Habana.
“Qué bueno, presidente Trump, que entienda usted que nuestros pueblos son libres, que nuestros pueblos están transitando por los caminos del socialismo”, afirmó Arreaza.
El pasado miércoles, en su discurso sobre el Estado de la Unión ante el Congreso, Trump aseguró que su gobierno impuso duras sanciones a “las dictaduras comunistas y socialistas de Cuba y Venezuela”.
“Cuando el jefe del imperialismo nombra a Cuba y Venezuela como sus adversarios, quiere decir que estamos en el camino correcto”, afirmó Arreaza.
Además de Cuba, el canciller venezolano visitará a otros países miembros de la Alianza Bolivariana Para los Pueblos de América (Alba), como Nicaragua y San Vicente y las Granadinas.
Por su parte, Tillerson inició en México una gira que lo llevará luego a la Argentina, Perú, Colombia y Jamaica.