El Litoral / dpa
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Los socorristas continuaban hoy extrayendo cuerpos calcinados de víctimas bajo toneladas de flujos piroclásticos lanzados el domingo por el Volcán de Fuego durante una potente erupción que dejó al menos 62 muertos.
De acuerdo con el último parte de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres de Guatemala (Conred), 62 personas murieron, al menos 300 resultaron heridas y 3.265 tuvieron que ser evacuadas debido a la erupción del volcán.
En tanto, personal de la Conred, bomberos y miembros del Ejército informaron que la comunidad de San Miguel de Los Lotes, en el departamento de Escuintla, fue devastada por las correntadas de flujos piroclásticos (una mezcla de gases volcánicos, materiales sólidos calientes y aire atrapado) que lanzó el volcán el domingo. El panorama del lugar era desolador este lunes.
David de León, portavoz de la Conred, detalló que ‘se conformaron seis grupos interinstitucionales desde el sector de El Rodeo en Escuintla‘, otro poblado golpeado por los flujos piroclásticos que descendieron por una de las laderas del volcán.
El presidente Jimmy Morales y la primera dama, Patricia de Morales, viajaron en tanto a las zonas más afectadas para constatar la devastación dejada por el volcán, ubicado a 55 kilómetros de Ciudad de Guatemala, en varios poblados.
Mynor Ruano, vocero de los Bomberos Municipales, también compartió con el noticiero una fotografía que muestra el interior de una humilde vivienda donde los cuerpos de cuatro niños de diferente edad yacen, abrazados, al fondo de la habitación. Ruano explicó que en el grupo también había un adulto, aunque dijo que no se estableció si era hombre o mujer.
El noticiero también mostró imágenes de algunos cuerpos tendidos sobre la superficie del material volcánico que quedó detenido sobre la carretera y las casas.
Las imágenes también mostraron a soldados del ejército de Guatemala, socorristas y periodistas cuando huían tras una voz de alerta por el descenso de nuevos flujos piroclásticos, en medio de una densa nube de ceniza volcánica y polvo.
Este episodio marca un nuevo alerta para los socorristas pese a que la noche del domingo el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) informó que la erupción había terminado.
Las autoridades advirtieron que el acceso a algunas poblaciones no fue posible todavía. Por eso, el secretario ejecutivo de la institución, Sergio García Cabañas, dijo que el número de fallecidos podría aumentar.
El Volcán de Fuego, uno de los tres activos que hay en el país -con 32 volcanes en total-, y una altura de 3.763 metros, está ubicado en una zona donde se unen tres de los 22 departamentos de Guatemala: Escuintla (sur), Sacatepéquez (centro-sur) y Chimaltenango (oeste).
De acuerdo con las cifras oficiales, hay además 1,7 millones de afectados y 1.711 personas refugiadas en albergues.
El Gobierno de Guatemala declaró anoche duelo nacional por tres días por la ‘irreparable pérdida de vidas humanas‘ en la tragedia.
El presidente Morales también firmó un decreto, en consejo de ministros, para el establecimiento de un estado de calamidad en los tres departamentos bajo influencia del volcán. El instrumento deberá ser aprobado por el Legislativo.
La ceniza que expulsó el volcán se expandió hasta 60 kilómetros y llegó hasta Ciudad de Guatemala. Esto obligó a la suspensión de operaciones en el aeropuerto internacional La Aurora, en la capital, tanto para vuelos privados como comerciales. Sin embargo, esta mañana, a las 8:30 horas locales, el aeropuerto retomó sus operaciones, indicó la Dirección de Aeronáutica Civil en un tuit.
La Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) informó que la misma tarde del domingo se inició la labor de limpieza, por lo que se espera que este lunes se reactive la actividad de navegación aérea.