Tras la detención de una monja de la comunidad de las Hermanas Trinitarias por abuso sexual, el Obispado de San Isidro confirmó que otra religiosa de la misma congregación también fue denunciada por el mismo delito.
Esta semana fue detenida María Tellez Fajardo, conocida como "Sor Marina", de 64 años, acusada de tocar los genitales de una menor a su cargo.
Tras la detención de una monja de la comunidad de las Hermanas Trinitarias por abuso sexual, el Obispado de San Isidro confirmó que otra religiosa de la misma congregación también fue denunciada por el mismo delito.
En un comunicado, la institución católica explicó que ya habían solicitado a las autoridades de la congregación la investigación de los hechos y las exhortaron a separar del Hogar a las religiosas denunciadas.
"En el mes de octubre del año pasado, se toma conocimiento de un/a menor que denuncia en la Justicia un presunto abuso por parte de una Religiosa que vivía y trabajaba en el Hogar Comunidad de Hermanas Trinitarias (perteneciente a la Congregación de las Hermanas Trinitarias), con sede en Boulogne", se indicó en el comunicado emitido por el Obispado en las últimas horas.
Y se agregó: "En ese mismo momento se pidió a las autoridades de la Congregación iniciar la investigación canónica correspondiente.
Al percibir una demora en el inicio de la actuación por parte de la Congregación, el Obispado decidió de oficio comenzar el proceso.
En abril pasado se efectuó en la Justicia otra denuncia por parte de otro/a menor (el comunicado no especifica sexo), y también se inició el proceso canónico correspondiente.
"Se exhortó a la Congregación a separar del Hogar a quienes fueron denunciadas mientras dure la investigación", expresaron en el comunicado.
Ayer, María Tellez Fajardo, conocida como "Sor Marina", de 64 años, fue detenida por estar acusada de tocar los genitales de una menor a su cargo.
Tras la detención, la Congregación de las Hermanas Trinitarias emitió un comunicado en el que dio a conocer el "apoyo incondicional a la hermana Marina y particularmente poner de resalto el perjuicio irreparable que con todo ello se está generando".
"Las Hermanas Trinitarias somos una comunidad de religiosas, fundada en 1885 en Madrid por el Padre Francisco Méndez y la Madre Mariana Allsopp, con la misión de abrir una puerta de Esperanza a muchas jóvenes que necesitan de nuestra ayuda ya que en sus hogares y por diversos motivos no reciben la contención necesaria para desarrollar sus proyectos de vida", manifestaron.
Y agregaron: "A partir de un episodio cuanto menos confuso y que requiere de una investigación profunda de la Justicia a la que la propia hermana se ha sometido voluntariamente desde hace semanas, que se hable de una manera generalizada y sin ninguna información real en contra de ella y de la Institución, es una verdadera tragedia. Difícilmente el daño personal e institucional que se está generando pueda repararse, aún cuando todo quede finalmente aclarado en el futuro".
En el comunicado, la comunidad comentó además que fue la misma monja quien tras enterarse de la denuncia solicitó presentarse ante la Justicia: "La Institución le designó abogados defensores que presentaron hace más de dos semanas el escrito en el cual Marina se puso a entera disposición y se ofreció a dar todas las explicaciones que fueran necesarias".
"Por nuestra parte como Institución y ante la existencia de una denuncia penal, por consejos de nuestros asesores y para evitar re-victimizar a la denunciante, a quien le brindamos todo nuestro apoyo, aprovechando un requerimiento del hogar de San Miguel de una voluntaria temporaria fue la hermana Marina para allí a ayudar, motivo por el cual ningún contacto con la denunciante o el resto de las niñas de Boulogne ha tenido todo este último tiempo", explicaron.
La investigación está a cargo del fiscal Marcelo Fuenzalida de la UFI Especializada en Delitos Conexos a la Trata de Personas de San Isidro, quien indagó a Sor Marina en las últimas horas, pero ella negó los abusos.
Con información de Telam