La Justicia Federal de Rosario condenó a 18 años de prisión al jefe de una banda narco con vínculos con “Los Monos”, que comerciaba estupefacientes con la presunta protección de efectivos de la seccional 15ta de la Policía provincial mientras estaba prófugo por un homicidio, informaron fuentes judiciales.
En una sentencia dictada este jueves, el Tribunal Oral Federal 3 de Rosario, integrado por los jueces Osvaldo Facciano, Eugenio Martínez y Omar Paulucci, condenó a Cristian “Negro” González como organizador del tráfico de estupefacientes en la zona de Villa Moreno y a otras 12 personas a penas menores como miembros de su organización criminal.
González es hermano de Norberto “Chino” González, un lugarteniente de la narcobanda “Los Monos” que fue asesinado en 2017, poco antes de ir a juicio con los cabecillas de esa organización.
Además, durante el juicio oral se ventilaron vínculos entre miembros de la banda liderada por el “Negro” González e integrantes de “Los Monos”, así como la presunta protección de policías de la seccional 15ta, que permitían el narcomenudeo al principal condenado.
La banda operaba en Villa Moreno, en el sur de Rosario, el mismo barrio donde en Año Nuevo de 2012 ocurrió el triple crimen de militantes sociales a manos de un narco de la zona, que los confundió con “soldaditos” de otra banda del narcomenudeo.
Mientras ejercía el comercio ilícito de drogas en ese barrio, González estaba prófugo en una causa por homicidio, también ligada a una venganza narco.
Según dijo durante el debate el fiscal del juicio, Federico Reynares Solari, la banda contaba con la protección de la comisaría 15ta de Rosario, que “le permitía lograr la libertad de personas detenidas” y que González “se moviera a sus anchas sin ser detenido”, a pesar de un pedido de captura.
Entre los condenados se encuentra Marcela Vanesa Medina, la expareja del “Chino” González, el hombre de “Los Monos”, que fue sentenciada a 8 años y 6 meses de prisión, según el veredicto.
También fueron condenados a esa misma pena los hermanos Nery y Axel Rodríguez, mientras que el resto de los integrantes de la banda recibió penas de entre 7 y 3 años de prisión.
Según la acusación del fiscal, la banda de González llevó adelante la venta de drogas en Villa Moreno “con dominio territorial y despliegue de violencia”, a través de tiroteos y “aprietes” a otros grupos con los que disputaba ese mercado ilegal.