Los actores Olivia Hussey y Leonard Whiting emitieron una demanda en contra de los estudios de cine Paramount, acusándolos de explotación sexual infantil durante el rodaje de la película "Romeo y Julieta" de 1968, cuando ambos eran menores de edad.
Olivia Hussey y Leonard Whiting, protagonistas de la película, iniciación acciones contra el estudio debido a las presiones para rodar desnudos infantiles y posteriormente emitirlo en pantalla.
Los actores Olivia Hussey y Leonard Whiting emitieron una demanda en contra de los estudios de cine Paramount, acusándolos de explotación sexual infantil durante el rodaje de la película "Romeo y Julieta" de 1968, cuando ambos eran menores de edad.
La demanda argumenta que el director, fallecido en 2019, les había asegurado que no habría desnudos y que en su lugar usarían ropa interior color piel en la escena de cama requerida para la narrativa. Sin embargo, una vez en el set de filmación los convenció de quitarse la ropa.
Según los protagonistas, días antes del rodaje Zeffirelli les suplicó a Hussey, de 15 años, y a Whiting, de 16, que actuaran desnudos con maquillaje corporal pues de no hacerlo la película fracasaría, y se comprometió a no fotografiar ni publicar ningún desnudo, faltando así a su promesa.
La denuncia alega que los actores sufrieron angustia mental y emocional en los 55 años que transcurrieron desde el estreno del filme y que por esa escena perdieron oportunidades laborales. Ambos reclaman daños y perjuicios por valor de más de 500 millones de dólares.
Ante la prensa, el abogado de los actores, Solomon Gresen, puntualizó que "las imágenes de desnudos de menores son ilegales y no deben exhibirse".
"Estos eran niños muy pequeños e ingenuos en los años 60 que no entendían lo que estaba a punto de golpearlos. De repente, se hicieron famosos a un nivel que nunca esperaron y, además, fueron violados de una manera que no sabían cómo manejar".
Cabe mencionar que la película tuvo un alto impacto al momento de su estreno y se hizo con varias nominaciones a los premios Oscar.
La demanda se presentó bajo la Ley de Víctimas Infantiles de California, que suspendió temporalmente el plazo de prescripción para las denuncias más antiguas de abusos sexuales a menores.