Mayer: "Los estudiantes apoyan una educación con transparencia económica"
El periodista estuvo en Rosario y Santa Fe, donde se reunió con distintos estudiantes universitarios para dialogar sobre el conflicto que pone en vilo la cursada regular de las casas de estudio públicas.
Mayer con estudiantes universitarios en la ciudad de Santa Fe. Crédito: Archivo
Martes 22.10.2024
13:57
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Las últimas semanas encuentran al gobierno nacional presionando para auditar la administración económica de las universidades nacionales y, en frente, a militantes de agrupaciones de izquierda y kirchneristas acusando – junto a diversas autoridades académicas – que esa decisión atenta contra la educación pública. En ese marco, Bryan J. Mayer mantuvo conversaciones con distintos estudiantes independientes para conversar sobre los acontecimientos.
Un mano a mano tuvo lugar a metros del Monumento a la Bandera entre el funcionario y Jerónimo Borga, el estudiante de Derecho de la Universidad Nacional de Rosario que se hizo viral por su fuerte discurso contra aquellos que usan la militancia universitaria para posicionarse dentro de distintos partidos o acceder a puestos en el Estado. Consultado por El Litoral, Mayer elogió al joven asegurando que “es necesario que haya muchos Jerónimos en el país y especialmente en las universidades, entendiendo algo que debería ser normal: a la facultad se va a estudiar y formarse, no a prepararse para agarrar un puestito a través del político al que le reparten folletos en las aulas”. En ese sentido destacó el crecimiento que está teniendo la agrupación “Alternativa” en distintas casas de estudio del país, sin pertenencia partidaria y con libertad ideológica entre sus integrantes. “También hay que luchar por recuperar el sentido común: donde hay dinero que es de todos los argentinos debe controlarse cada centavo” agregó Mayer.
En sus redes, el periodista publicó la foto del momento acusando que “hoy, después de décadas de transformar gran parte de las universidades en centros de adoctrinamiento de izquierda; de silenciar ideas distintas para no sufrir la cancelación represora de esa misma izquierda; de no rendir cuentas a los argentinos que mantienen el sistema con su laburo; los estudiantes santafesinos vuelven a luchar por ponerle un freno a los que buscan imponerse desde el poder, la trampa y el tongo”
Sobre la intención del gobierno nacional de avanzar con auditorías apuntó que “lo vengo diciendo desde diciembre: este gobierno está trabajando indispensablemente en normalizar el funcionamiento del Estado. Puede parecer increíble que haya que explicar para qué es una universidad y por qué es importante controlar en qué se gastan la plata de todos los argentinos, pero cuando vemos la bajada de línea que se viene dando desde el 2003 tiene sentido”. Sin embargo, Bryan asegura que “las nuevas generaciones entienden que es necesario barajar y dar de vuelta, terminar con tanta intervención forzada y el degeneramiento fiscal que nos llevó a este Estado bobo y del vale todo”.
En ese sentido había escrito que “el despilfarro y la destrucción del sentido común fue tan grande estas décadas que para algunos resulta normal permitir que unos pocos se patinen fondos millonarios sin dar explicaciones. Esos son los que atentan contra la universidad pública, no los que deciden terminar con tanta locura y auditarla... para hacerla más eficaz y para todos de verdad.”
El rafaelino comenta a este medio que “son muchos los jóvenes que están cansados de ver cómo algunos avanzan en sus carreras a través de la militancia o como, justamente, no avanzan en sus estudios para seguir militando y percibiendo algún beneficio” por eso, sostiene, “los estudiantes de verdad apoyan que se busque una educación pública de calidad y con transparencia económica, y que cada facultad deje de ser un nido partidario.”
Finalmente, quiso recordar que “tanto nuestra provincia de Santa Fe, como la vecina Córdoba, son íconos históricos de la lucha de estudiantes por una universidad pública, de calidad y enfocada en el estudio, por eso creo una obligación acompañar a estos jóvenes que ahora luchan contra lo que se generó en las últimas décadas: aulas tomadas por la militancia; contenidos ideologizados; descontrol de las arcas y el apriete como moneda corriente. No podemos ser esclavos de unos pocos pícaros y ser silenciosos nos convierte en cómplices”.