El Litoral
Después de aterrizar rovers en Marte y enviar sondas para hacer vuelos de reconocimiento de otros planetas del sistema solar, la NASA está lista para mandar una nave espacial a su centro, el Sol, con el fin de analizar minuciosamente la estrella con la que vivimos.
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El lanzamiento de la sonda solar Parker desde el Centro Espacial J. F. Kennedy en Cabo Cañaveral, Florida, está previsto para este sábado. Según la agencia espacial estadounidense, el lanzamiento será el comienzo de una misión para resolver los misterios que han desconcertado a los astrofísicos durante más de 60 años.
Será la primera sonda que alcanzará la atmósfera solar, conocida como corona, anunció la NASA en su página web. Volará a tan sólo 6,1 millones de kilómetros de la superficie solar, que es más de siete veces más cerca de lo que ha llegado nunca una nave.
Primero se dirigirá a Venus, el segundo planeta en orden de distancia desde el Sol después de Mercurio, y usará su gravedad para acercarse lo más posible al astro.
Las vueltas alrededor de Venus encaminarán a la sonda a alcanzar su primer punto de mayor aproximación al sol en noviembre. Entonces realizará 24 órbitas durante siete años, acercando gradualmente la nave cada vez más al Sol.
La sonda llevará a cabo sus investigaciones científicas en una región peligrosa de intenso calor y radiación solar, señaló la NASA. Pero incluso a una distancia de 6,1 millones de kilómetros volará lo suficientemente cerca del Sol como para poder observar cómo el viento solar pasa de una velocidad subsónica a una supersónica, de acuerdo con la NASA.
La sonda, que pesa 700 kilos, orbitará alrededor del Sol en un recorrido elíptico y alcanzará una velocidad de unos 200 kilómetros por segundo. Además empleará una combinación de cálculos e imágenes para estudiar la corona y la evolución del viento solar.
La NASA espera que la misión le ayude a conocer mejor el funcionamiento de las estrellas y a recopilar datos para mejorar las predicciones meteorológicas en la Tierra. Asimismo espera que descubra muchos de los misterios del Sol como, por ejemplo, por qué la corona, al contrario de lo esperado por las leyes de la física, está más caliente que la propia superficie solar.
Los principales objetivos científicos de la misión son rastrear cómo la energía y el calor se mueven a través de la corona y explorar qué acelera el viento solar así como las partículas energéticas solares. Los científicos llevan más de 60 años buscando respuestas pero hasta ahora no han podido llevar a cabo investigaciones porque no existía la ingeniería térmica necesaria.
Protegida por una cubierta de casi 12 centímetros de grosor de compuesto de carbono, la sonda está diseñada para aguantar más radiación que ninguna otra nave antes y temperaturas de más de 1.300 grados centígrados, dijo la NASA.
La sonda solar Parker llevará cuatro conjuntos de instrumentos diseñados para estudiar los campos magnéticos y partículas de plasma y energía, así como tomar imágenes del viento solar.
La sonda forma parte del programa "Living With a Star" (viviendo con una estrella) de la NASA para explorar aspectos del sistema Sol-Tierra que afectan directamente a la vida en nuestro planeta. Se trata de la primera sonda de la NASA que recibe el nombre de un científico vivo, el astrofísico Eugene Parker, de 91 años.
"La sonda solar viajará a una zona del espacio que no ha sido explorada nunca antes", dijo Parker cuando la agencia espacial bautizó la sonda con su nombre.
"Es muy emocionante que finalmente podamos echar un vistazo. A uno le gustaría tener algunas medidas más detalladas de lo que está pasando en el viento solar. Estoy seguro de que habrá algunas sorpresas. Siempre las hay", añadió.
En los años 50, Parker planteó una serie de conceptos sobre cómo las estrellas desprenden energía. Lo llamó cascada de viento solar energético y describió un completo y complejo sistema de plasmas, campos magnéticos y partículas energéticas que constituyen este fenómeno.
Además teorizó sobre la energía que constantemente se escapa del Sol y que afecta a los planetas y al espacio en todo nuestro sistema solar, un fenómeno cuya existencia se ha probado a través de la observación directa.
La Agencia Espacial Europea también tiene previsto enviar una sonda al Sol en octubre. Pese a que la Solar Orbiter fue desarrollada independientemente, la misión cooperará con la sonda solar Parker.
Con información de dpa.