China y Rusia comenzaron a operar esta semana un nuevo centro meteorológico espacial destinado a proporcionar información y predicciones a los operadores aeronáuticos internacionales.
El centro monitorea eventos meteorológicos espaciales incluyendo la actividad solar y emite avisos para operadores de aviación.
China y Rusia comenzaron a operar esta semana un nuevo centro meteorológico espacial destinado a proporcionar información y predicciones a los operadores aeronáuticos internacionales.
Según informaron medios chinos, se trata del cuarto centro de este tipo. Los tres restantes están bajo la órbita de Estados Unidos, un consorcio europeo y un conjunto de países conformado por Australia, Canadá, Francia y Japón.
"Monitorea eventos meteorológicos espaciales incluyendo la actividad solar y emite avisos para operadores de aviación", explicó Zhang Xiaoxin, del Centro Nacional de Satélites Meteorológicos, sobre el proyecto proyecto que fue aprobado el año pasado por la Organización Internacional de Aviación Civil, la agencia de Naciones Unidas que supervisa el sector.
Según reprodujo el diario estatal China Daily, el funcionario alertó también sobre la peligrosidad de las llamaradas solares. En ese sentido, explicó que "el clima espacial puede afectar a la seguridad de la navegación, las comunicaciones, el posicionamiento y la efectividad aviónica".
También detalló que las llamaradas solares pueden resultar en una radiación diez veces mayor que la que los pasajeros y la tripulación recibirían en tierra, "algo que puede afectar a su salud", agregó.
La nueva entidad, con instalaciones en Pekín y Moscú, depende de las administraciones Meteorológica y de Aviación Civil de China, así como de sus contrapartes rusas, explica aquel medio asiático.
En el caso de China, la administración Meteorológica monitorea el clima espacial, emite predicciones e investiga tecnologías relacionadas con este ámbito, para lo cual emplea una combinación de satélites y redes de seguimiento en tierra.
En septiembre pasado, el satélite meteorológico chino Fengyun 3E tomó sus primeras fotografías del sol. Esto permitirá mejorar las predicciones acerca de la actividad del astro y su repercusión en la meteorología terrestre y espacial.
El Fengyun-3E despegó el pasado 5 de julio desde el Centro de Lanzamiento de Satélites de Jiuquan (desierto del Gobi, norte de China) y es un satélite de uso civil que monitoriza el clima, los océanos, el hielo y el tiempo espacial.
"Erupción solar máxima"
A fines de octubre, se registró una potente llamarada sobre la superficie del sol, un evento al que los expertos catalogaron en la clase máxima de la escala de medición de la actividad solar. Según los especialistas, se trató de la tormenta más fuerte que se haya detectado en el ciclo actual de nuestra estrella.
La erupción se produjo en el lado que apunta a la Tierra y se prolongó por aproximadamente media hora. Se clasificó como un destello de clase X1 y el Observatorio de Dinámica Solar (SDO) de la NASA logró capturar una imagen del evento.
Como explica esa agencia espacial, la clase X indica las llamaradas más intensas, mientras que el número proporciona más información sobre su fuerza. Un X2 es dos veces más intenso que un X1, un X3 es tres veces más intenso, y así sucesivamente.
La llamarada fue lo suficientemente poderosa como para causar temporalmente un fuerte apagón de radio en la parte soleada de la Tierra, con el foco en América del Sur, indicó el Centro de Meteorología Espacial de Estados Unidos.