Día Internacional de la Audición: el 4,2% de la población tiene algún déficit auditivo discapacitante
Captura de pantalla
17:20
El propósito es promover una acción global para mejorar las estrategias de prevención y tratamiento de la pérdida auditiva. Aproximadamente el 4,2% de la población tiene algún déficit auditivo discapacitante y muchas de sus causas son prevenibles. En los niños, la audición es clave para aprender el lenguaje hablado, tener un buen desempeño escolar e interactuar socialmente. Es por ello que quienes padecen pérdidas auditivas tienen dificultades para afrontar estos procesos. Sin embargo, podrían beneficiarse enormemente con un diagnóstico temprano y con el equipamiento adecuadas en el momento adecuado.
En este 2020 la OMS insistirá en la idea de que una intervención eficaz y oportuna puede servir para que las personas afectadas de pérdida de audición puedan desarrollar todo su potencial y llamará la atención sobre las opciones existentes para ello.
Tenés que leer
Archivo El Litoral
Algunos de los principales mensajes en el día de la audición:
En todas las etapas de la vida, la comunicación y una buena salud auditiva nos conectan con los demás, con nuestra comunidad y con el mundo.
Intervenciones adecuadas y practicadas a tiempo pueden facilitar a las personas con pérdida de audición el acceso a la educación, el empleo y la comunicación.
En el mundo no hay acceso suficiente a intervenciones para tratar la pérdida de audición, como puedan ser los audífonos.
Los sistemas de salud deben ofrecer intervenciones tempranas.
Es de vital importancia saber cuidar tus oídos para evitar problemas. Por eso hay que realizar controles auditivos -en especial a los bebés recién nacidos-, audiometría de control al ingreso escolar primario, evitar la exposición a ruidos de elevada intensidad y usar con baja intensidad los reproductores de música.
Señales que puedan indicar que hay problemas en la audición:
-Dificultad para mantener conversaciones sobre todo si hay más de una persona hablando.
-Necesidad de subir el volumen de la televisión y la radio constantemente.
-Preguntar habitualmente que te repitan las palabras o frases que no las acabas de entender.
-Dificultad para escuchar los sonidos agudos.
-No sentir el tictac de un reloj.
-No entender lo que te dicen si no miras la cara de la persona con quien hablas.