Cada 23 de abril, el mundo entero se une para celebrar el Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor, una fecha emblemática que rinde homenaje a la importancia de los libros como vehículos del conocimiento, la creatividad y la diversidad cultural.
La fecha se estableció en homenaje a la importancia de los libros como vehículos del conocimiento, la creatividad y la diversidad cultural.
Cada 23 de abril, el mundo entero se une para celebrar el Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor, una fecha emblemática que rinde homenaje a la importancia de los libros como vehículos del conocimiento, la creatividad y la diversidad cultural.
Esta celebración, auspiciada por la UNESCO, no solo exalta la labor de autores y escritores, sino que también resalta la necesidad de garantizar el acceso equitativo a la literatura y la protección de los derechos de autor.
La UNESCO, como guardiana de la cultura y el conocimiento, lidera una labor integral en la promoción de la lectura, la alfabetización y la diversidad literaria. Desde su Red de Ciudades Creativas hasta sus iniciativas para fomentar la alfabetización y el aprendizaje móvil, la UNESCO trabaja incansablemente para asegurar que los libros estén al alcance de todos, en todas partes.
Una de las principales metas de esta celebración es impulsar el acceso libre al conocimiento científico y a los recursos educativos. En un mundo cada vez más digitalizado, la democratización del acceso a la información es fundamental para el progreso humano.
La UNESCO, en colaboración con autores, editores, docentes, bibliotecarios, instituciones públicas y privadas, así como con organizaciones no gubernamentales y medios de comunicación, trabaja para hacer realidad este objetivo.
El Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor no solo es una ocasión para celebrar la riqueza de la literatura y la creatividad humana, sino también para reflexionar sobre los desafíos que enfrenta el mundo editorial en la era digital.
Es un llamado a proteger y valorar el trabajo de los autores, garantizando que reciban el reconocimiento y la compensación que merecen por su labor creativa.
En esta jornada, millones de personas en todo el mundo se unen en actividades que van desde lecturas públicas hasta ferias del libro, pasando por debates y conferencias sobre el papel de la literatura en la sociedad contemporánea.
Es un momento para celebrar la magia de los libros y su capacidad para transformar vidas, inspirar cambios y unir a las personas en torno al poder de la palabra escrita.
En resumen, el Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor es mucho más que una simple celebración. Es un recordatorio de la importancia de proteger y promover la diversidad cultural, la creatividad y la igualdad de acceso al conocimiento en todo el mundo.
También es un llamado a seguir trabajando juntos para construir un mundo donde todos tengan la oportunidad de disfrutar de los beneficios de la lectura y la literatura.
La UNESCO y el Comité Asesor de la Capital Mundial del Libro quedaron impresionados por el fuerte enfoque de Estrasburgo en los libros para enfrentar los desafíos de las tensiones sociales y el cambio climático, con programas como "Leer para el Planeta".
La ciudad enfatiza la capacidad de los libros para fomentar el debate y la discusión sobre preocupaciones ambientales y conocimientos científicos, centrándose en los jóvenes como agentes de cambio.
Estrasburgo también fue elogiada por su patrimonio literario y las actividades que organizó destacando muchas disciplinas artísticas, desde la música hasta el teatro y la ilustración.
Además, la localidad francesa tiene una experiencia significativa en la organización de eventos abiertos al exterior a gran escala.