Luego de ser tapa de las revistas Times y Rolling Stone, el pontífice apareció retratado en el barrio Borgo Pío de Roma, con un diseño muy cuidado y llevando en la mano izquierda su famoso portafolio negro con la palabra "Valores" escrita en español, reportó la agencia italiana Ansa.
De la parte inferior del portafolio se asoma una prenda que algunos identificaron como un calcetín desgastado, pero que también pudiera ser una vieja bufanda azulgrana, los colores de su querido club de fútbol, San Lorenzo de Almagro.
El mural fue hecho con gusto y sin ninguna vulgaridad, tanto que una fotografía fue divulgada en Twitter por la Vatican Comunication, una cuenta del Pontificio Consejo de las Comunicaciones Sociales.
El epígrafe decía: "les mostramos un graffiti hallado en Roma en las calles cercanas al Vaticano".