Tik Tok y Twitter actualizaron una vieja polémica sobre las distancias en los planisferios, donde se discute y dice que no representan el tamaño real de los países. Existe una explicación muy clara de la razón de la distorsión cartográfica.
Quién no recuerda los mapas del colegio, aquellos planisferios donde aprendimos a identificar los países y sus límites. Resulta que aquellos mapas con los que conocimos la geografía mundial, parece, no contienen las dimensiones verdaderas de la extensión de la gran mayoría de las naciones.
Y resulta que, Tik Tok y Twitter, tienen algo importante para decir al respecto. Por lo menos, en esas redes, es donde se desató una polémica que siguen de cerca tanto la ciencia como los influencers.
Un Ticktoker, que se conoce como sayginyalcin, puso el tema en agenda con un video, recibiendo -por su puesto- todo tipo de opiniones encontradas. Ian Bremmer, un politólogo de Estados Unidos, fue quien en Twitter desarrolló toda la explicación que fue “levantada” por el influencer, desafiando los planos que conocemos y estamos acostumbrados a ver, para darnos una idea de cómo se distribuyen los países y los continentes sobre la Tierra. Todo ellos están dibujados mediante la proyección cartográfica ideada por el geógrafo y matemático flamenco Gerardus Mercator en el siglo XVI, más precisamente en el año 1569.
Estos mapas de Mercator fueron necesarios para la confección de cartas náuticas, ya que permitía trazar rutas de rumbo constante como líneas rectas, a diferencia de otros sistemas más precisos. Su mapa no quería replicar de forma exacta el mundo, sino ayudar a navegarlo mejor.
Hoy, los cartógrafos aclaran que al tratarse a una proyección cilíndrica, las áreas más alejadas del Ecuador de nuestro planeta son las que sufren mayor distorsión respecto a la realidad. Dicho de otra manera, deforma los espacios entre los meridianos y los paralelos, de forma que la distancia entre estos aumenta cada vez más a medida que nos acercamos a los polos.
Así, el mundo imaginado por Mercator distorsionaba los polos y empequeñecía a las tierras en torno al ecuador. La decisión era consistente con su interés en guiar a los navegantes por el mundo, pero tremendamente engañosa a la hora de representar al globo terráqueo.
El resultado final mostraba a África que quedaba reducida a una fracción de su tamaño real, así como la India, los archipiélagos entre el Índico y el Pacífico o Brasil. Europa y muy especialmente las tierras por encima del Círculo Polar Ártico (muy abundantes, al contrario que más allá del Círculo Polar Antártico) obtuvieron un tamaño superior. Para muchos historiadores y pensadores, Mercator era sinónimo de eurocentrismo o, peor aún, de la dominación cultural y colonial europea por sobre el hemisferio Sur.
¿Por qué “falla” el mapa de Mercator?
“Una proyección cartográfica no es más que una forma de representar la superficie redondeada y en tres dimensiones de la Tierra en un mapa plano de dos dimensiones. El cartógrafo flamenco Gerardus Mercator (1512-1594) imaginó la Tierra contenida en un cilindro infinitamente largo con un radio equivalente al terrestre, de forma que únicamente el ecuador tocaba el cilindro. A partir de ahí, trazó rectas desde el centro de la Tierra hasta todos los puntos de la superficie terrestre. Unas rectas que al alargarse cortaban también la superficie del cilindro. De este modo habría una correspondencia entre los puntos de ambas superficies. Una vez hecho lo anterior, se podía desplegar el cilindro, generando un mapa plano de la superficie terrestre”, explica el español Gonzalo Prieto, licenciado en Humanidades y creador del sitio Geografía Infinita.
Y agrega: “La proyección de Mercator es cilíndrica al ser la superficie sobre la que se proyecta un cilindro. Además, los meridianos no convergen en los polos y forman, junto con los paralelos, una malla de líneas rectas perpendiculares unas con otras. Al conservar los ángulos de las líneas de latitud y longitud, se dice también que es conforme. Por otro lado, las líneas de rumbo fijo (loxodrómicas) se convierten en líneas rectas en la proyección de Mercator. Es una cualidad que tuvo un valor incalculable para los navegantes. Gracias a ellas podían dibujar una línea recta en el mapa, determinar el rumbo y zarpar hacia el destino”.
Tomando el tamaño real de los países, recuperar el tamaño real de los continentes es fácil. Lo que es difícil es ensamblarlos después. En el caso de América es relativamente sencillo, pero en Asia es tarea imposible: si quisiéramos tomar el mapa ajustado como referencia (y darle continuidad, como sucede en el mundo real), Rusia no podría rellenar todas sus fronteras. Pegada a Europa dejaría a Asia huérfana; y viceversa. Ahí reside el truco de Mercator y de todas las distorsiones generadas por las proyecciones: cuadran un círculo imposible al representar sobre plano un mundo que no lo es.
La web TheTrueSize.com aplica a la inversa los cálculos matemáticos detrás de la proyección de Mercator y permite comparar los tamaños reales de los diferentes países del mundo. Estos son algunos ejemplos:
1.- Rusia cabe en África
Al seleccionarlo en el mapa, la masa continental de Rusia (el país más grande de la Tierra y que ocupa más de 17 millones de kilómetros cuadrados, la novena parte de la superficie total del planeta) se va haciendo más pequeña cuanto más la acercamos al ecuador.
2.- Estados Unidos y Brasil
Mientras que Estados Unidos es un país cuyo territorio continental está situado por encima del Trópico de Cáncer, la parte norte de Brasil se sitúa junto al Ecuador. Esto hace que en la proyección Mercator las diferencias de superficie entre ambas naciones sean notables. Al colocar los 48 estados contiguos de EE UU (todos, salvo Alaska y Hawái, ocupan unos 7,7 millones de kilómetros cuadrados) sobre el país sudamericano, sin embargo, observamos que, de hecho, Brasil (8,5 millones de kilómetros cuadrados, aproximadamente) es más grande.
3.- España es más pequeña que Kenia
A pesar de que en la proyección de Mercator parece lo contrario, España (aproximadamente, medio millón de kilómetros cuadrados) ocupa menos superficie que Kenia (0,6 millones de kilómetros cuadrados, más o menos). Esto es así porque, mientras que el Ecuador atraviesa el país africano, la Península Ibérica se sitúa al norte del paralelo 36.
4.- Alaska es grande (pero no tanto)
Debido a su posición, cercana al Círculo Polar Ártico, Alaska (1,7 millones de kilómetros cuadrados) es uno de los territorios más deformados en los mapas dibujados según la proyeción de Mercator. Su superficie está exageradísima respecto a su tamaño real. Si colocamos su territorio junto al Ecuador, apreciamos que de hecho este estado americano es más pequeño que la República Demócratica del Congo (2,3 millones de kilómetros cuadrados).
5.- Islandia es más pequeña que Benín
Islandia (poco más de 100.000 kilómetros cuadrados) es otro territorio del Atlántico norte muy sobredimensionado en los mapas. A pesar de lo que parece en la proyección de Mercator, cuenta con menos superficie que Benín (112.000 kilómetros cuadrados), situado en el golfo de Guinea.
6.- La Antártida y África
La Antártida (14 millones de kilómetros cuadrados) es el territorio más distorsionado en los mapamundis porque es el más alejado del Ecuador. El continente helado es gigantesco, pero no más que África, como sugieren los mapas de Gerardus Mercator.
7.- Canadá y Sudamérica
Debido a su situación septentrional, entre los paralelos 49 y 82, la superficie de Canadá (unos 10 millones de kilómetros cuadrados) también está muy sobrerrepresentada. Si acercamos el país al Ecuador, vemos que equivale a la mitad norte de Sudamérica.