El mundo de la realeza británica llora la pérdida de Robert Fellowes, quien falleció a los 82 años, dejando un vacío en la familia real y en el corazón de aquellos que lo conocieron.
El cuñado de la princesa Diana fue un apoyo fundamental para Isabel II durante el periodo más turbulento de su reinado.
El mundo de la realeza británica llora la pérdida de Robert Fellowes, quien falleció a los 82 años, dejando un vacío en la familia real y en el corazón de aquellos que lo conocieron.
Cuñado de la princesa Diana y tío de los príncipes Harry y Guillermo, Fellowes fue un apoyo fundamental para Isabel II durante uno de los períodos más turbulentos de su reinado.
Nacido en 1941 en Sandringham, Fellowes fue hijo del administrador de la finca William Fellowes y de Jane Fellowes, quien era descendiente del general de brigada Algernon Ferguson.
Su conexión con la familia real comenzó desde su infancia, cuando la entonces princesa Isabel lo conoció y bromeó diciendo que era el único de sus secretarios privados que había sostenido en brazos.
Educado en el prestigioso Eton College, Fellowes destacó en críquet pero optó por enlistarse en la Guardia Escocesa en lugar de seguir una carrera universitaria.
Tras su paso por el ejército, trabajó en el sector financiero antes de unirse al Palacio de Buckingham en 1977 como secretario privado adjunto de la reina. Su dedicación y habilidades lo llevaron a convertirse en secretario privado de Isabel II en 1990, un rol que desempeñó hasta 1999.
Durante su mandato, Fellowes se convirtió en un pilar de estabilidad para la reina en el "annus horribilis" de 1992, un año marcado por escándalos familiares y problemas matrimoniales dentro de la familia real.
Fue él quien redactó el primer borrador del emotivo discurso que la reina dio tras la muerte de la princesa Diana, demostrando su capacidad para manejar situaciones de gran sensibilidad y presión.
En 1999, Fellowes dejó su puesto en la familia real y continuó su carrera en el sector bancario. A pesar de su retiro de la vida pública, mantuvo una relación cercana con sus familiares reales.
Su cuñado, el conde de Spencer, le rindió homenaje en las redes sociales, describiéndolo como un "verdadero caballero" y expresando su orgullo por haber sido su familiar.
Harry, el duque de Sussex, fue uno de los primeros en recibir la noticia de la muerte de su tío, y rápidamente contactó a su tía y primos, así como a su tío Charles Spencer.
Fellowes había estado presente en eventos clave, como las bodas de los príncipes de Gales y de los duques de Sussex, subrayando su continuo vínculo con la familia real a pesar de su retiro.