Martes 17.1.2023
/Última actualización 23:49
Una mancha de color naranja intenso fue ganando terreno en el mapa de la región central de la República Argentina durante los últimos meses del año 2022 y siguió creciendo en el primer tramo de este ciclo: es la que indica la evolución de la sequía que, a los fines gráficos, asocia ese color a la condición de severa. Hay otras gamas: amarillo y naranja claro. Desde leve a moderada, todas indican lo mismo: sequía.
Junto con las altas temperaturas, la falta de lluvias es tema de preocupación recurrente por estos días por el impacto que genera en la producción, los ecosistemas y la vida misma de la gente.
La situación es excepcional y así lo confirma Karina Flores, meteoróloga de la Dirección Central de Monitoreo del Clima del Servicio Meteorológico Nacional, quien explica las razones de este fenómeno y anticipa lo que se podría esperar, así en potencial, para los próximos meses.
El mapa muestra el pronóstico para los primeros tres meses del año.- ¿Es esta una situación excepcional, inesperada?
- Hace tres años que estamos observando déficit de lluvias consistentes en toda la región, no siempre en la cuenca del Plata. Lo venimos monitoreando y observamos que fue variando el área de sequía a lo largo del tiempo. Dentro de todo era esperable porque estamos en condiciones de La Niña que en nuestra región está asociada a sequía.
Lo que nos sorprende, y es llamativo y extraordinario es la persistencia de esta Niña que ya lleva tres años consecutivos. Hay muy pocos casos en los que se observó una situación similar. Esta permanencia de déficit de lluvia por tanto tiempo genera consecuencias en la producción, en el suelo, en los ecosistemas, en todo.
Esperan mejoras para el segundo trimestre del año- ¿Esta situación se suma o se relaciona con la bajante del Paraná?
- Si recordamos la bajante anterior que fue la más extrema, en el año 2021, no estaba asociada a lluvias por debajo de lo normal. Por ejemplo en Rosario, donde se registraban lluvias normales o levemente superiores a las normales, se veía la bajante.
Los déficit estaban concentrados en el centro de la Cuenca del Plata que es donde está la naciente del Paraná y por eso impactó en los niveles de los ríos de toda la cuenca. Pero dentro de todo estaba acompañado en nuestra región por lluvias normales.
La particularidad de esta bajante que estamos observando ahora es que está acompañada también por déficit de lluvia en la región.
Como avanzó la sequía en los últimos meses de 2022.En la misma mesa
El Servicio Meteorológico Nacional participa, junto con otros organismos, de la Mesa Nacional de Monitoreo de Sequía que coordina la Secretaría de Agricultura de la Nación. Allí están el Instituto Nacional del Agua, Inta, Conae, el área de Riesgo Agropecuario, Facultad de Agronomía de la UBA y otras instituciones. "Desde el SMN mostramos los monitoreos de lluvia principalmente, también índices de sequía, pronósticos trimestrales y el balance hídrico; Conae expone el estado de humedad del suelo; el Inta muestra los impactos entre productores. Es un gran volumen de información que se termina consensuando en un mapa que se publica todos los meses". El último, donde se podrá ver cómo crece esa mancha naranja, se conocerá en los próximos días, anticipa Flores. Aunque la realidad de la región confirmó hace rato que allí también la crisis dejó de ser moderada para ser severa.
- Ya son varios informes trimestrales que vienen advirtiendo por temperaturas por encima de las habituales y lluvias por debajo del promedio en la región. ¿Qué se espera para los próximos meses?
- Para este primer trimestre lo que se espera, puntualmente para la provincia de Santa Fe, son precipitaciones normales o inferiores a las normales (representadas por un color naranja claro).
La noticia más alentadora es que los pronósticos de la Niña indican para el comienzo del otoño una transición hacia condiciones neutrales. Por ese motivo en los modelos que analizamos para hacer los pronósticos trimestrales estamos viendo ese cambio de señal y ya no se ven precipitaciones tan inferiores a las normales.
La comparación de los últimos tres años.- ¿Qué quiere decir que exista una transición hacia condiciones neutrales?
- El fenómeno Enso (Enos, en castellano) tiene tres fases: la fase Niño, la fase Niña y la fase neutral donde no prevalece ni un calentamiento ni un enfriamiento en el océano Pacífico y no está relacionada con condiciones de sequía ni con lluvia extrema. Esta información se monitorea todos los meses y los informes se publican en nuestra página.
¿Es el cambio climático?
- ¿Este fenómeno de sequía está asociado al cambio climático?
- No puedo decir que lo sea si o si. Seguramente hay mucho de la señal de cambio climático porque sabemos que por el aumento de las temperaturas a nivel global y de emisiones de gases de efecto invernadero ya es un hecho que el planeta se está calentando. Y sabemos que eso trae aparejada una intensificación de fenómenos de sequía. Entonces, probablemente esté relacionado pero no podemos decir que sea un efecto si o si porque las sequías también son fenómenos naturales del clima: siempre hay períodos más secos y más húmedos. Para saber si esto responde al cambio climático hay que hacer estudios científicos que llevan tiempo y esperar a que termine el evento para hacer ese análisis.
- Para recapitular, ¿en qué situación estamos y qué podríamos esperar en los próximos meses?
- La situación es crítica, es una condición de sequía severa para prácticamente gran parte de la región central del país. Después, hay mucha mayor parte afectada por sequía moderada. Quizás la buena noticia es que si se cumplen los pronósticos (que hay que mirar con cuidado y en potencial) y entráramos en una fase neutral de la Niña, podría traer un alivio en las lluvias para el otoño.
Pero la salida de la sequía no es rápida, menos luego de tres años de déficit de lluvias. Se van a necesitar lluvias normales o superiores a las normales persistentes para volver a recargar los suelos.
Informe del SMN