Un equipo de especialistas en paleontología estudia los huesos fosilizados de un dinosaurio hallado en la Patagonia de Argentina, que podría haber sido el animal más grande del mundo.
El fósil fue encontrado en el 2012 en la llamada Formación Candeleros, en la provincia argentina Nauquén.
Un equipo de especialistas en paleontología estudia los huesos fosilizados de un dinosaurio hallado en la Patagonia de Argentina, que podría haber sido el animal más grande del mundo.
El fósil fue encontrado en el 2012 en la llamada Formación Candeleros, en la provincia argentina Nauquén, y conserva una veintena de vértebras de la cola y varios huesos pélvicos de un ejemplar bautizado como MOZ-Pv 1221.
Tras una serie de estudios, los investigadores señalaron que los restos pertenecen a un titanosaurio que puede considerarse uno de los más grandes animales terrestres descubiertos hasta ahora.
Los científicos del Conicet detallaron, además, que este titanosaurio posiblemente vivió hace más de 98 millones de años, y pudiera pertenecer a la familia de los saurópodos, caracterizados por su gran tamaño, patas gruesas, cuellos y colas alargados.
Pero ciertas particularidades de los huesos hallados en la Formación Candeleros, en Neuquén, sugieren que se trata más bien de una especie desconocida hasta el momento.
Aunque los expertos argentinos indicaron que el animal haya tenido "probablemente de una masa corporal comparable a un Patagotitan o un Argentinosaurio o incluso más grande”, aclaran que todavía no estiman cuánto pudo haber pesado en vida este dinosaurio.