La empresa está compuesta por 47 empleados, entre administrativos, gerentes, maquinistas y operarios. Llamativamente, para los tiempos que corren, son los mismos desde hace diez años; no ha mermado ni incrementado el número de empleados a pesar de las demandas de trabajo que han tenido.
Pablo Carranza, gerente comercial, y Federico Bonavetti, gerente administrativo, coincidieron en valorar la labor que diariamente desarrollan los trabajadores de la firma.
La idea original de la instalación de AGL en Sauce Viejo fue basada en dos esquemas, puesto que para el Grupo Clarín era un negocio de distribución, porque se imprime Clarín y Olé para todo el centro- norte del país, que trae como beneficio llegar mucho más temprano a los centros de distribución, como ser los de Santa Fe y Córdoba. Hoy por hoy en nuestra provincia, a las tres de la mañana ya comienza la logística de distribución, y en Córdoba a las cinco o seis de la madrugada. Y para diario El Litoral un negocio centrado en lo publicitario, porque la vieja máquina del diario no permitía que toda la paginación fuera a color, esta máquina nueva permite hasta 96 páginas todas a color.
La impresora rotativa Goss Uniliner al ser tan grande y tener tantas posibilidades productivas, como por ejemplo imprimir 40 mil ejemplares hora de 96 páginas color o 70 mil ejemplares hora de 48 páginas.
Cabe mencionar que la planta cuenta con dos turnos fijos de impresión, de 14 a 20 y de 21 a 3 de la madrugada. Si el trabajo lo requiere, se completa con horas extras con el mismo personal que cumple los turnos fijos. Carranza comentó que han llegado a trabajar turnos de 24 horas o de 20 horas de acuerdo a la necesidad laboral.
Fundamentalmente todo lo que es gráfica los trabajos se concentran más en la segunda quincena del mes - la cuarta semana y la primera del mes siguiente-, son las más demandante, puesto que es donde los proyectos comerciales salen a la calle.
La empresa no sólo trabaja con sus socios- clientes, sino que ha expandido hacia los productos comerciales. En tal sentido, Federico Bonavetti, sostuvo que no sólo se centralizaron en el negocio local, si no que hubo que expandirse. En cuanto a la impresión de diarios, por una cuestión de distancias, se abarca cierto radio no muy lejano por la distribución. Indicó, además, “es inviable, aunque podamos ser súper efectivos e eficientes trabajar para un diario de Formosa o de Santa Cruz, por costos y tiempos, es imposible tenerlos como clientes”. Explicó que para poder sostenerse hubo que focalizarse en la folletería comercial donde no hay tanta exigencia de tiempos, “se trabaja con anticipación, lo que permite abarcar más a nivel nacional”. En tal sentido, Carranza, remarcó “la eficiencia en los tiempos nos permite llegar desde el norte del país hasta el sur. Hicimos trabajos para Uruguay, aunque no se prosperó. Tenemos clientes en Córdoba, Corrientes, provincia de Buenos Aires y en Capital Federal”. Es preciso mencionar que cuando la planta comenzó a funcionar la facturación era un 60 % con lo que eran los clientes socios - Clarín y El Litoral-, y el 40 % estaba representado por terceros clientes. Hoy ese panorama es inverso, el 70 % de facturación de la planta está dada por de terceros, y un 30 % por lo que son clientes socios. “Esto hace que la empresa sea más viable en el largo plazo, no depender tanto de la facturación de quien hoy es tu dueño”, destacó el gerente administrativo.
Estos terceros clientes pueden ser diarios regionales o folletería comercial. Para captar el mercado, se realizó un relevamiento en Santa Fe y zona para ver que otros diarios se imprimían en la región, aunque ya contaran con su propia impresora, y también que comercio realizaban folletería comercial, entre ellos: supermercados, casa de electrodomésticos, interiores de libro, etc., para poder ofrecerles un producto de mejor calidad y aprovechar los beneficios que tiene la rotativa instalada, puesto que la misma tiene adicionales que permiten una muy buena competencia en lo que es tiempo de producción. Además, admite a los folletos tabloides abrocharlos en línea. Para que el trabajo sea más completo se le instaló una refiladora en línea y un sistema de pegado automático, que para productos de formato revista se pega el producto también en línea. Este conjunto de beneficios que presenta la Goss Uniliner hace que los tiempos de producción son muy rápidos.