El Litoral / Télam
Dos explosiones en una iglesia del sur de Filipinas mataron a 20 personas e hirieron a 81. Todavía ningún grupo armado se adjudicó el atentado.
El Litoral / Télam
Dos explosiones sacudieron este domingo una catedral en una isla en el sur de Filipinas y mataron al menos 20 personas, en un ataque que parece querer torpedear el acuerdo de paz firmado en la región entre el gobierno nacional y milicias separatistas.
La primera explosión golpeó la puerta de la catedral en medio de la misa dominical y la segunda la parte exterior del edificio, justo cuando grupos de rescatistas y policías intentaban ayudar a los heridos y evacuar a los sobrevivientes, informaron las Fuerzas Armadas y la Policía en un comunicado conjunto, citado por la agencia de noticias EFE
Según estas fuerzas, al menos 81 personas resultaron heridas en la catedral Nuestra Señora del Monte Carmelo, algunas de ellas de gravedad.
La catedral se encuentra en la isla de Jolo y en la ciudad del mismo nombre, que además es la capital de la provincia de Sulu, la única de las cinco provincias de la nueva región autónoma de Bangsamoro que votó en contra de su creación en el referéndum de hace una semana.
La región autónoma de Bangsamoro fue la solución que en 2014 consensuaron el gobierno nacional y la milicia separatista Frente Moro de Liberación Islámica para poner fin a un conflicto armado de cinco décadas en el sur del país, una zona mayoritariamente musulmana.
Después de muchas idas y vueltas, los ciudadanos de esas regiones del sur ratificaron hace una semana de manera masiva el acuerdo de paz y la creación de la región autónoma.
La iniciativa obtuvo un apoyo del 87% en las urnas, pero en la provincia de Sulu, donde hoy atacaron la catedral, ganó el No.
"Con este acto de terrorismo y asesinato de soldados y civiles, los enemigos del Estado han desafiado la capacidad del gobierno de garantizar la seguridad de la ciudadanía en esa región. Las Fuerzas Armadas aceptan el desafío y aplastarán a esos impíos criminales", aseguró el vocero presidencial, Salvador Panelo, en un comunicado.
Por su parte, el asesor presidencial de Seguridad Nacional, Jun Esperon, relacionó directamente el atentado con el reciente referéndum y aseguró que los atacantes no podrán "arruinar las preferencias de una mayoría que apostó por la paz".
El asesor presidencial para la paz, Carlito Galvez, en tanto, prometió que el gobierno mantendrá sus compromisos con la decisión popular tomada hace una semana en el sur del país.
"Hemos recorrido un largo camino para lograr una paz duradera en Mindanao. Ahora no es el momento de acobardarse y ser intimidado por un acto tan egoísta y cobarde", sostuvo en un comunicado.
Ningún grupo armado se adjudicó aún el atentado.
En Sulu, operan varias milicia islamistas vinculadas al Estado Islámico, como Abu Sayyaf, Maute o los Luchadores por la Liberación Islámica del Bangsamoro.
Todas ellas han sido responsables de sangrientos atentados en la región y son considerados una de las principales amenazas al acuerdo de paz que puso fin a un conflicto que dejó más de 150.000 muertos.