Martes 14.12.2021
/Última actualización 18:02
Al menos 72 exagentes de las Fuerzas de Seguridad Nacional y otras personas relacionadas con el antiguo Gobierno de Afganistán fueron asesinados por los talibanes desde su llegada al poder en agosto pasado, según la Organización de las Naciones Unidas, que mantiene a los islamistas bajo sanciones por actividad terrorista.
"Entre agosto y noviembre, hemos recibido denuncias fidedignas de más de 100 asesinatos entre las antiguas Fuerzas de Seguridad Nacional Afganas y de otros asociados con el antiguo Gobierno, con 72 de estos asesinatos atribuidos al talibán", declaró la Alta Comisionada Adjunta para los Derechos Humanos (Acnudh), Nada Al Nashif, en un informe para el Consejo de Seguridad de la ONU.
Además, continuó, en la provincia de Jorasán, los talibanes quitaron la vida al menos a 50 personas sospechosas de ser miembros del grupo terrorista Estado Islámico del Jorasán (prohibido en Rusia). "Fueron reportados métodos brutales de asesinar, incluida la ejecución en la horca, la decapitación y la exposición de cuerpos en público", indicó.
Al Nashif expresó preocupación ante los continuos informes sobre ejecuciones arbitrarias en todo el país, pese a la amnistía anunciada el 15 de agosto.
El representante permanente de Afganistán ante la Oficina de la ONU en Ginebra, Nasir Ahmad Andisha confirmó las palabras de la representante de Acnudh, al agregar que estas denuncias son solo un eco de la gran campaña intimidatoria, y son pocos los casos que aparecen en los medios.
Afganistán se sumergió en el caos tras la caída del presidente Ashraf Ghani, el pasado 15 de agosto. El movimiento talibán tomó el poder y puso fin a dos décadas de conflicto armado con el Gobierno, que estuvo apoyado por Estados Unidos y otros países de la OTAN.
A principios de septiembre los talibanes formaron un gobierno interino, en el que la mitad de sus miembros figuran en la lista de sancionados del Consejo de Seguridad de la ONU.