Martes 8.3.2022
/Última actualización 16:11
Nadie puede dudar del compromiso que tienen los ucranianos con su país, sobre todo algunas personalidades ligadas al deporte que decidieron participar activamente en el conflicto con Rusia. Pero hay una historia que es de lo más asombrosa: un hombre llamado Giorgi Dzanghirian, quien fuera presidente de la Federación de Rugby de Ucrania, se alistó valientemente en el ejercito a los 83 años.
Dzanghirian, que fue jugador del modesto club Sokil Rugby de Lviv, un ciudad situada al oeste del país, fue uno de los dirigentes más reconocidos de la entidad que se fundó en 1992 como organismo para regular dicha disciplina.
Fue su propio ex club el que comunicó a través de su página de Facebook que Giorgi Dzanghirian se había unido a las tropas que velan por la seguridad del territorio ucraniano. Aunque la noticia tomó mayor repercusión cuando Octavian Morariu, presidente de Rugby Europe, lo difundió en su cuenta de Twitter.
Según informó Le Parisien, el club Sokil Rugby Lviv está muy involucrado en las hostilidades entre Rusia y Ucrania para ayudar a sus compatriotas: la sede del club se está utilizando actualmente como refugio de tránsito para los viajeros que quisieran huir a Europa occidental. Se les ofrecen camas y comida.
Esta no es la primera vez que el rugby ucraniano tiene una conexión directa contra la guerra. Está el antecedente de Mykita Bobrov, un joven jugador de rugby que murió de un disparo en la entrada de Kiev, un suceso que también fue comentado en las redes sociales por el presidente de Rugby Europe, Octavian Morariu. “Muy tristes noticias provenientes de la familia del rugby ucraniano. Mykita Bobrov, un joven jugador de rugby, recibió un disparo junto con su familia en la entrada de Kiev. Nuestro corazón está con la comunidad de rugby de Ucrania y todos los que están sufriendo en estos tiempos difíciles”, escribió Morariu en las redes sociales.
Otro atleta que también perdió la vida en este conflicto fue el campeón nacional de kickboxing Yehven Zvonok, también segundo en la clasificación general de la Copa del Mundo, quien fue asesinado por los diversos bombardeos rusos el 3 de marzo, en la ciudad de Chernihiv, en el norte del país.