La activista sueca Greta Thunberg ha pedido este viernes ayuda a través de sus redes sociales para poder encontrar un "transporte" con el que cruzar el océano Atlántico de nuevo y acudir a la Conferencia sobre Cambio Climático de Naciones Unidas, conocida como COP25, que se celebrará en Madrid tras la renuncia del Gobierno chileno.
"Ahora que la COP25 se ha trasladado oficialmente de Santiago a Madrid, voy a necesitar algo de ayuda. Resulta que crucé medio mundo en sentido contrario", explicó Thunberg en su cuenta de Twitter. "Necesito encontrar una forma de cruzar el Atlántico en noviembre", añadió.
La joven, que rechaza el transporte en avión para reducir la huella ecológica, llegó a Nueva York a finales de agosto en un barco especialmente preparado para reducir al mínimo las emisiones contaminantes, después de 15 días de navegación.
Thunberg emprendió una campaña de concientización que la llevó a Canadá como último destino. La activista ha lamentado que no pueda visitar "esta vez" países del centro y el sur de América, pero explicó que quiere viajar a Madrid para seguir alertando de la "emergencia climática y ecológica. Si alguien me pudiese encontrar algún transporte, le estaría agradecida", escribió.
Este viernes la ONU confirmó en un breve comunicado que Madrid será sede de la cumbre del clima de Naciones Unidas. Chile era el país donde iba a tener lugar la reunión internacional, pero las protestas hicieron que el miércoles el presidente Sebastián Piñera renunciara a celebrar la cumbre. Menos de un día después de ese anuncio, Piñera y el presidente español en funciones, Pedro Sánchez, acordaron que Madrid sustituiría a Santiago de Chile.
Sin embargo, el país latinoamericano mantendrá la presidencia del encuentro, lo que supone coordinar las negociaciones de los delegados de los casi 200 países que asistirán a la conferencia. En total, se estima que la asistencia rondará las 25.000 personas.
La decisión de que Madrid fuera la nueva sede se cerró en coordinación con Naciones Unidas. Hasta este viernes faltaba que el llamado bureau de la COP, una especie de mesa ejecutiva permanente, acordara el traslado. En principio, se esperaba que sus miembros, una decena de personas, se reunieran el lunes, pero su presidente, el polaco Michal Kurtyka, ha decidido adelantar los contactos entre todos para que la decisión se tomara este viernes, como ocurrió.