(Desde Israel)
En épocas de guerra y puesta en evidencia del poderío militar israelí, El Litoral hace un racconto de los principales elementos en la mesa de negociaciones entre el país que combate al terrorismo y el nuestro.
(Desde Israel)
Argentina no necesita una cúpula de hierro, porque su configuración de problemas y conflictos es distinto al de las Fuerzas Armadas y compañías militares que lo desarrollan en Israel. Sin embargo, estas mismas tienen la capacidad de dar respuesta a varias de las necesidades reales de nuestro país que son imprescindibles de saber cuando se pone sobre la mesa la relación bilateral entre ambos Estados. Vale destacar que esta relación es prácticamente comercial, ya que en términos bilaterales de Defensa, el agregado israelí tiene base en Chile y no hay presencia específica en nuestro territorio, más allá de que sea un ítem propuesto.
Con algunas toneladas de componentes electrónicos entregados por Israel hasta poco antes de la guerra con Hamas, la actualización del Tanque Argentino Mediano a su versión 2CA2 está a cargo de la empresa Elbit Systems, vinculada al Ministerio de Defensa Israelí.
Las actualizaciones de los instrumentos de precisión de tiro están asimiladas a los de los tanques israelíes Merkava IV, que actualmente están desplegados en la Franja de Gaza. Originalmente se había intentado hacerlo con los del modelo III, sin embargo la ralentización en la gestión de Mauricio Macri y Oscar Aguad hizo que eso quede desactualizado y ya no se fabrique.
La computadora de vuelo y las posibilidades de combate simulado que se le da a los Pampa IA63 es aviónica desarrollada por Israel Aerospace Industries. Esta empresa fue creada en 1953 y tiene alrededor de 15 mil empleados para la fabricación de aeronaves civiles y militares en todo el mundo.
En épocas de drones, los de la familia Hero fueron comprados por el Estado Argentino (como adelantó El Litoral al mencionar las gestiones del general santafesino Martín Lluch del Estado Mayor Conjunto). En aquel momento, este medio detalló los tipos de aviones no tripulados comprados y sus capacidades. Vale destacar que están probados en combate, que fueron vendidos también en Europa y que en nuestro territorio se busca comprobar su factibilidad y aprovecharlos para desarrollar la doctrina de empleo en el cuadro de situación actual.
La vuelta a la vida del Pucara Fénix IA58F, es decir su remotorización y adaptación de motores, como la actualización de aviónica en general, se lleva a cabo con asociaciones con Israel. Esto viene de la mano con el desarrollo en INVAP del POD ISR que le permite a la Fuerza Aérea recuperar al menos simbólicamente algo de su capacidad de exploración y vigilancia.
Argentina también observa muchas otras oportunidades en otros espectros de la defensa que ofrece Israel. Las ametralladoras giroestabilizadas y remotas del sistema REMAX, que ya es dotación de las brigadas infantes en Brasil, son una opción tentadora para actualizar la capacidad de fuego de los mecanizados desplegados en nuestro territorio.
Una de las empresas mencionadas también desarrolla un mortero automático que se puede montar sobre un Hummer o un M113. Este es un mortero que se pone en posición y computa de forma automática; sólo debe colocarse el proyectil. En la línea, se puede mencionar el interés argentino en el sistema de artillería ATMOS 2000 de 155 mm, que serviría para complementar la Brigada Blindada a ruedas y cuya adquisición ya está prevista en algunos niveles administrativos del presupuesto nacional.
También se piensa en alternativas de mercado que van desde proyectiles guiados por láser hasta proyectos más ambiciosos como el establecimiento de plantas de capital israelí en nuestro país. Mirando hacia atrás, algunas soluciones en la ciberdefensa argentina también fueron mejoradas con desarrollo israelí, por ejemplo, como parte del dispositivo que giró en torno a la cumbre de presidentes del G20 hace algunos años atrás y que involucró a la firma Rafael. Lo propio ocurrió con las radios de bases, vehiculares y personales Tadiran.
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