Dos adolescentes murieron tras ser alcanzados por un rayo mientras buscaban señal para el celular en medio de una tormenta. Los menores, de 13 y 16 años, eran primos y estaban en una reunión familiar.
Los menores, de 13 y 16 años, eran primos y estaban en una reunión familiar. Las víctimas subieron a una pequeña colina para obtener conexión y allí fueron impactados.
Dos adolescentes murieron tras ser alcanzados por un rayo mientras buscaban señal para el celular en medio de una tormenta. Los menores, de 13 y 16 años, eran primos y estaban en una reunión familiar.
El trágico episodio ocurrió el pasado jueves 13 de junio en una finca de la comunidad rural de San Miguel, municipio de Muelle de los Bueyes, en la Región Autónoma del Caribe Sur de Nicaragua. Las víctimas subieron a una pequeña colina para obtener conexión y allí fueron impactados.
Las víctimas fueron identificadas como Never José Robledo Martínez, de 16 años de edad, y Wilfredo Antonio Obando, de 13, según informó el portal Nicaragua Investiga. La Policía Nacional clasificó el hecho como una muerte accidental.
Todo comenzó el pasado jueves en medio de una reunión familiar, cuando los primos salieron de la casa en medio de la tormenta para lograr obtener algo de señal para poder estar conectados a través de sus celulares.
Los jóvenes subieron a una colina cercana, pero en lugar de conexión, encontraron la muerte tras ser alcanzados por un rayo que los impactó de lleno. Sus cuerpos quedaron tendidos en el pasto.
Sus familiares advirtieron que los adolescentes tardaban en regresar y comenzaron a preocuparse, por lo que después de unas horas decidieron salir a buscarlos. Finalmente, encontraron sus cuerpos, uno al lado del otro.
Dieron aviso a las autoridades y personal policial llegó al lugar junto con los médicos. Tras constatar la muerte de los menores, el forense revisó los cadáveres y determinó que ambos fallecieron a causa de una descarga eléctrica. De esta manera, se descartó la intervención de terceros.
Los primos asistían a una escuela de su comunidad, donde cursaban sus estudios secundarios en la modalidad sabatina, que es un régimen flexible que permite a los estudiantes acceder a un contenido intensivo sólo los fines de semana. Es dirigido a quienes no pueden asistir durante los días hábiles por otras cuestiones. La triste noticia conmocionó a los vecinos y a toda la comunidad educativa.
Estos episodios son comunes en Nicaragua, especialmente durante la temporada de lluvias que va de mayo a octubre. Las áreas rurales pueden tener un mayor riesgo debido a la exposición al aire libre durante las tormentas. Las autoridades suelen emitir advertencias y recomendaciones para evitar este tipo de accidentes.