A pesar de los llamados para que se prohiba el uso privado de fuegos artificiales, estos continúan siendo una parte significativa de las celebraciones de Año Nuevo en el país, con montones de pirotecnia lanzada en las calles de la ciudad cada año.
Cinco personas han muerto y decenas de trabajadores de emergencia resultaron heridos en una serie de incidentes relacionados con fuegos artificiales que empañaron las celebraciones.
A pesar de los llamados para que se prohiba el uso privado de fuegos artificiales, estos continúan siendo una parte significativa de las celebraciones de Año Nuevo en el país, con montones de pirotecnia lanzada en las calles de la ciudad cada año.
Entre los fallecidos se encontraban dos personas en el estado oriental de Sajonia, según el medio público local MDR, incluido un hombre de 45 años que murió tras manipular lo que se describió como una “bomba de fuegos artificiales”.
Los bomberos y otros trabajadores de servicios de emergencia fueron atacados por los fuegos artificiales durante las festividades de la noche del martes al miércoles, dijeron las autoridades.
En la capital Berlín, los bomberos respondieron a 1.892 incidentes en Nochevieja, 294 más que el año anterior, según un comunicado del departamento de bomberos de la ciudad. Más de 1.500 trabajadores de servicios de emergencia estuvieron de servicio.
Según el portavoz de la policía de Berlín, Florian Nath, 330 personas fueron detenidas en la capital en Nochevieja. Un oficial de policía resultó gravemente herido después de ser “presumiblemente golpeado por un fuego artificial ilegal” y está siendo operado en el hospital, dijo Nath.
“Varias personas alrededor de la escena atacaron a los oficiales de policía y es uno de los puntos bajos de esta noche”, agregó.
Mientras tanto, el departamento de bomberos de Múnich dijo que un fuego artificial desviado provocó un gran incendio en el balcón del primer piso de un edificio de apartamentos. El fuego luego se extendió a un apartamento en el segundo piso, según un comunicado del departamento.
El comunicado continuó diciendo que este año se vieron lesiones “particularmente graves” causadas por pirotecnia en Múnich. Tres niños, de dos, once y catorce años, resultaron gravemente heridos durante incidentes en la ciudad.
Mientras que el niño de dos años y el de once años sufrieron quemaduras en las manos, el cuello y la cara, el niño de 14 años se voló partes de la mano con un petardo de Nochevieja. Todos ellos tuvieron que ser trasladados a hospitales para recibir tratamiento médico adicional, dijo el departamento.
En un comunicado en X, la ministra del Interior de Alemania, Nancy Faeser, elogió el trabajo de los servicios de emergencia, agregando que el “despliegue de fuertes fuerzas policiales de los estados federales y la policía federal y una represión temprana y consistente son los medios correctos contra los perpetradores de violencia y caos”.
Y continuó: “Sin embargo, los muchos arrestos solo en Berlín y los ataques renovados a los oficiales de policía también muestran que esta represión era absolutamente necesaria”.
El sindicato de los primeros respondedores emitió un comunicado el miércoles condenando la violencia contra los servicios de emergencia.
“Es inaceptable que las personas que trabajan por el bien común sean repetidamente el objetivo de ataques. Bajo ninguna circunstancia se debe aceptar la violencia contra los empleados del servicio público como un riesgo laboral”, dijo la vicepresidenta Christine Behle.
La preocupación radica particularmente en los fuegos artificiales ilegales y caseros, según BVPK, una asociación alemana de pirotecnia. “Estos artefactos extremadamente peligrosos no tienen nada que ver con los fuegos artificiales legales y probados de Nochevieja de minoristas especializados o tiendas de descuento”, dijo el miembro de la junta Ingo Schubert.
“Cualquiera que asocie la peligrosa manipulación y el manejo ilegal de explosivos peligrosos con fuegos artificiales pequeños y seguros está confundiendo peras con manzanas”.
La organización ambiental alemana Deutsche Umwelthilfe renovó sus llamados a una prohibición nacional de la venta privada de pirotecnia en Nochevieja en un comunicado este miércoles, advirtiendo que el cambio de año una vez más se convirtió en “una noche de horror para innumerables personas”.
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