Conductoras sauditas se convirtieron este lunes en las primeras mujeres en adquirir licencias para manejar vehículos en el reino ultraconservador, a tres semanas de que el país deje des ser el único del mundo que prohíbe manejar a las mujeres.
Las conductoras podrán ponerse finalmente al volante a partir del 24 de junio. Escuelas de conducir para mujeres fueron abiertas en cinco ciudades del reino.
Conductoras sauditas se convirtieron este lunes en las primeras mujeres en adquirir licencias para manejar vehículos en el reino ultraconservador, a tres semanas de que el país deje des ser el único del mundo que prohíbe manejar a las mujeres.
"El primer grupo de mujeres recibió hoy (lunes) sus licencias de conducir sauditas", informó la agencia de noticias oficial de la monarquía árabe SPA, en un anuncio que fue rápidamente saludado por organizaciones de derechos humanos.
"La Dirección General de Tráfico comenzó a reemplazar los permisos internacionales por permisos sauditas en preparación al día 24 de junio, cuando se aplicará la decisión de permitir a las mujeres conducir automóviles en Arabia Saudita", agregó el medio estatal.
La expedición de los registros tuvo lugar en varias ciudades del reino, después de que la dirección de tráfico confirmase la veracidad del permiso internacional y evaluara las capacidades de ellas mediante una prueba práctica, según SPA, que no precisó cuántas mujeres las han recibido, informó la agencia de noticias EFE.
En septiembre de 2017, un decreto real anunció el fin de la prohibición de décadas para que las mujeres manejaran vehículos en el reino, y en mayo pasado se reveló que las mujeres podrán ponerse finalmente al volante a partir del 24 de junio.
Escuelas de conducir para mujeres fueron abiertas en cinco ciudades de Arabia Saudita, muchas de ellas con instructoras mujeres que obtuvieron sus carnés en el extranjero.
Mujeres sauditas habían hecho campaña para pedir al gobierno que levantara la prohibición, y algunas de ellas lo hicieron incluso subiéndose a autos y conduciendo, en señal de desafío y de protesta y para llamar la atención sobre su reclamo.
El príncipe heredero Mohamed bin Salman, de 32 años, es el artífice del fin de la veda, parte de una serie de reformas que el poderoso dignatario, hijo del rey Salman bin Abdelaziz, impulsa en Arabia Saudita, un país muy religioso donde las mujeres carecen de muchos de los que derechos de los que gozan sus congéneres del resto del mundo.
Este proceso se produce en un momento en el que las autoridades saudíes han detenido a varios activistas en las últimas semanas, incluidos algunos conocidos por luchar contra la prohibición de conducir a las mujeres, entre ellas Loujain al Hatloul, Aziza al Yusef e Iman al Nafyan.
La organización Amnistía Internacional (AI) expresó su beneplácito por el comienzo de la emisión de registros de conducir y volvió a pedir la liberación de las activistas detenidas.
"Damos la bienvenida a las autoridades saudíes que han finalmente expedido los permisos a las mujeres", indicó en un tuit la directora de campañas para Medio Oriente de AI, Samah Hadid.
"Pero las que han realizado campañas durante años para que ocurra esto están ahora tras las rejas, y no al volante. El gobierno debe liberarlas ya", agregó.
A pesar de la relajación de algunas normas que rigen en el reino ultraconservador, todavía se mantiene el régimen de tutelaje que somete a las mujeres a los varones de sus familias.
Con información de Télam