Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés) han reportado un aumento significativo en las visitas a urgencias relacionadas con COVID-19. Durante la semana que finalizó el 6 de julio, las visitas por esta causa aumentaron un 23.5% en comparación con la semana anterior. Este incremento se suma a una tendencia al alza que lleva varias semanas.
Además, los CDC han informado que el nivel de actividad vírica del COVID-19 en aguas residuales es alto a escala nacional desde el 6 de julio. Este indicador es una herramienta clave para detectar y anticipar brotes comunitarios de la enfermedad.
En México, la situación también muestra un repunte en los casos positivos de COVID-19. En las últimas tres semanas, la Secretaría de Salud ha registrado un aumento del 28% en la positividad de los contagios a nivel nacional en lo que va del año. Este incremento en los casos positivos destaca la necesidad de mantener y reforzar las medidas de prevención para evitar una mayor propagación del virus.
Mirá tambiénJoe Biden dio positivo de Covid-19 Ambos países se enfrentan a un nuevo desafío en la lucha contra la pandemia, subrayando la importancia de la vigilancia constante y la adaptación de las estrategias de salud pública para mitigar el impacto del COVID-19.
Nueva variante: KP.2 o FliRT
Hay una nueva variante del coronavirus. KP.2, miembro de las llamadas variantes FliRT, apodadas así por sus mutaciones, se ha convertido en la cepa de coronavirus dominante en Estados Unidos, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC). Estas variantes FliRT tienen ciertas mutaciones en común, pero siguen siendo parte de la familia ómicron del coronavirus.
Durante el período entre el 28 de abril al 11 de mayo, casi el 30% de los casos nuevos fueron causados por KP.2, frente a menos del 16% en el período de dos semanas anterior.
¿Qué debe saber la gente sobre esta nueva variante?
Contagiosidad y gravedad: KP.2 parece estar desplazando a JN.1 y subvariantes similares, que anteriormente eran las variantes dominantes en los Estados Unidos. Una de las razones por las que una nueva cepa desplaza a las previamente dominantes es que es tan contagiosa o más. Eso significa que KP.2 podría propagarse muy fácilmente.
La buena noticia es que KP.2 no parece causar una enfermedad más grave. Las hospitalizaciones asociadas con el covid-19 están en mínimos históricos. No hay razón para creer que las vacunas y tratamientos existentes dejarían de actuar contra ella.
Síntomas: Los síntomas de la infección por covid-19 incluyen secreción nasal, dolor de garganta, dolor de cabeza, fiebre, tos y dolores corporales. Algunas personas pueden experimentar síntomas más graves, como dificultad para respirar. El covid-19 también podría exacerbar afecciones subyacentes como la insuficiencia cardíaca.
Ninguno de estos síntomas es específico de KP.2, que hasta ahora no se ha informado que esté asociado con síntomas únicos que lo distingan de otras infecciones por coronavirus.
Pruebas rápidas: Las pruebas rápidas de antígenos son un método fácil y conveniente para detectar covid-19, aunque no son tan confiables ni precisas como las pruebas de PCR (reacción en cadena de la polimerasa) de laboratorio.
No hay indicios de que los test caseros sean menos efectivos para detectar esta nueva variante en comparación con variantes anteriores. Se recomienda que las personas se hagan un test rápido si tienen síntomas y podrían ser elegibles para recibir tratamiento antiviral.
Vacunas: Las vacunas existentes aún deberían tener actividad contra KP.2. Los CDC han emitido una guía que recomienda una segunda inyección de la vacuna que se lanzó por primera vez en el otoño de 2023 para las personas de 65 años o más.
Se espera que los funcionarios federales de salud recomienden una versión recientemente formulada de la vacuna covid-19 en el otoño. Si los funcionarios de salud predicen que KP.2 estará entre estas variantes, las vacunas de otoño probablemente serán aún más efectivas contra KP.2.
Aislamiento: A principios de este año, los CDC eliminaron su requisito de aislamiento de cinco días. Ahora, la agencia recomienda que las personas diagnosticadas con covid-19 se queden en casa hasta que no tengan fiebre durante al menos 24 horas y sus síntomas mejoren.
Durante los próximos cinco días, aún deben intentar tomar precauciones adicionales, como usar mascarillas y limitar el contacto cercano con otras personas.
Tratamientos antivirales: Las personas con alto riesgo de desarrollar una enfermedad grave a causa del covid-19 deberían considerar consumir tratamientos antivirales. Esa categoría de alto riesgo incluye personas mayores, personas inmunocomprometidas y aquellas con afecciones médicas subyacentes graves.
Hay dos medicamentos orales disponibles y también hay una inyección de un tercer antiviral. Se aconseja a todos que consulten con su proveedor de atención médica para determinar si deben tomar un tratamiento antiviral si contraen el coronavirus y, de ser así, cuál y cómo acceder a él.
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